La odisea de los 90 migrantes venezolanos que terminaron varados en el aeropuerto de Guayaquil

Los pasillos del Aeropuerto de Guayaquil se convirtieron la noche del martes 25 de octubre en áreas de descanso para unos 90 migrantes venezolanos que esperaban viajar de vuelta a su país en un vuelo humanitario.

Muchos de los migrantes permanecían acostados en el piso, junto con sus pertenencias. Familias enteras, en algunos casos. Improvisaron camas en las bancas de espera.

Su retorno se complicó debido a que el avión que llegaría a recogerlos no pudo ingresar al espacio aéreo ecuatoriano, ya que la empresa propietaria de la aeronave no contaba con los permisos del organismo competente, según un comunicado de la Autoridad Aeroportuaria de Guayaquil (AAG).

"El Ministerio de Relaciones Exteriores y el Consulado de Venezuela organizaron la llegada de un vuelo humanitario para el traslado de venezolanos a su país en la compañía aérea Conviasa (empresa aérea de Venezuela) cuyo permiso de operación había sido revocado por el Consejo Nacional de Aviación Civil hace más de tres semanas y por lo tanto no está autorizado a volar a territorio ecuatoriano", se lee en un comunicado de la AAG.

Se agregó que "el Ministerio de Relaciones Exteriores, el día de ayer (lunes 24 de octubre), recién envió un comunicado al Gerente General de AAG, solicitando la exoneración de la tasa aeroportuaria para dicho vuelo humanitario, aparentemente sin coordinar con las autoridades de control aéreo del Ecuador, ignorando que dicha compañía no podia volar sobre territorio ecuatoriano por no cumplir con una serie de normas exigidas por la autoridad aeronáutica".

Este Diario pidió unos comentarios a la Cancillería de Ecuador y a la Dirección General de Aviación Civil (DGAC), pero no hubo respuestas.

Ante esta situación, autoridades locales coordinaron acciones para buscar un lugar de permanencia temporal para los ciudadanos extranjeros.

En horas de la madrugada de este miércoles 26 de octubre se logró ubicar varios albergues en la ciudad.