ONG ayudó a 1.300 familias: cómo ser parte de esa lista

‘No estás solo’ es una fundación que nació como un brazo social de la iglesia cristiana Familia de Dios. Son alrededor de 100 voluntarios activos (ingenieros, arquitectos, doctores, comunicadores, educadores, entre otros), que se encuentran trabajando distintos proyectos sociales en Guayaquil, con la misión de hacer visible a Jesús a través de obras benéficas. 

Alimentos, medicina, ropa, mochilas escolares y juguetes son algunos de los recursos que han entregado a centenas de familias en el Puerto Principal, pero también tienen el interés de llegar a distintas zonas de la costa y la sierra ecuatoriana.

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Josué Rincón, pastor principal de la iglesia cristiana conocida como ‘La casa de los imperfectos’ habla con este Diario y relata los inicios de este trabajo social y cómo creció a lo largo de los últimos tres años. “Hace 10 años salíamos a entregar palabras de esperanza en las calles del centro de la ciudad.

En ese entonces “No estás solo” no era fundación, sino un brazo social que buscaba ayudar al necesitado. Panes, chocolate, café, ropa y una palabra de amor entregábamos a los más vulnerables. Luego, en el 2021, quisimos ser más formales para tener un mayor alcance, y eso nos permitió trabajar con voluntarios profesionales que se unieron a la visión de nuestra iglesia”, asegura.

Rincón cuenta varios de los proyectos que han sido parte de esta institución benéfica, entre ellos Abrigo 91 (entrega ropa a indigentes); Amor sobre ruedas (entrega juguetes, comida, ropa a sectores de Daule, Durán y Guayaquil); la Canasta de Amor que ha sido un aporte para 1.300 familias en tres años.

El líder espiritual también destaca el mayor logró obtenido este 2024, ‘La casa de la familia’, donde se reconstruyó un inmueble en mal estado en el barrio Cristo del Consuelo, gracias al aporte de la congregación cristiana, integrada por distintos profesionales, entre ellos expertos en construcción.

“Fue uno de los mayores sueños. Pues la familia era muy pobre, y una de sus integrantes se encontraba en malas condiciones de salud. Ha sido uno de los actos de amor más grandes que hemos podido materializar, y el que nos ha inyectado para junto a otras organizaciones seguir levantando viviendas a futuro”, alega. 

Evelyn Cevallos, líder operacional de esta organización, también habla con EXPRESO, y manifiesta el aprendizaje que le ha dejado trabajar con los más la comunidad. “Todo lo que hacemos en la fundación ha sido muy intencional y alineado de llevar un mensaje de esperanza y el amor de Jesús. Estoy feliz de que contabilizando el trabajo hemos visitado 22 comunidades a nivel nacional con los diferentes programas. Fuimos a Alausí después del aluvión con ayuda humanitaria y refuerzos primordiales (...) Estoy segura que este proyecto nació en el corazón de Dios”.

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Andrés Bravo, líder del equipo de producción, manifiesta que el trabajo “no está terminado”, y que espera que la ayuda social pueda ser más difundida a nivel local y en el resto del país para mayor alcance económico.

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