La ONU celebra la "amnistía migratoria" que Ecuador entregará a venezolanos
El actual régimen anunció el reinicio del proceso de renovación de la Visa de Residencia Temporal de Excepción (VIRTE)
La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones de Naciones Unidas (OIM) celebraron este lunes 2 de septiembre de 2024 el reciente decreto presidencial en Ecuador para regular por un procedimiento extraordinario a ciudadanos venezolanos, que se calcula podría beneficiar a unos 100.000 integrantes de esa comunidad.
"La iniciativa ayudará a miles de personas a salir de las sombras de la irregularidad y superar las barreras que han sufrido por años sin documentación, con el fin de que puedan contribuir a las comunidades que los acogen", destacó en un comunicado Eduardo Stein, representante de las dos agencias para los migrantes venezolanos.
El decreto del 24 de agosto otorgó lo que fue denominada una "amnistía migratoria" a migrantes y refugiados venezolanos que habían iniciado registros de regularización en 2022 pero no habían logrado completar los trámites necesarios.
Principales problemas para la regularización venezolana
Muchos de ellos no podían hacerlo por la falta de pasaportes o documentos de identidad en regla y en este sentido se admitirán en el proceso extraordinario también los que hayan expirado hace más de cinco años.
La medida anunciada otorgará a estas personas un Visado de Residencia Temporal de Excepción (VIRTE) válido para dos años y renovable por otros dos.
Ecuador, que acoge la quinta mayor comunidad de refugiados y migrantes venezolanos en América, ha regularizado por este tipo de procedimientos con anterioridad a 97.000 personas, cifra que podría duplicarse con este nuevo decreto, que marca el tercer proceso de regularización extraordinaria que se anuncia en el país desde 2019.
Otros de la región como Colombia, Perú y Brasil han dictado medidas similares con el fin de dar alternativas para impulsar la regularización de los miembros de la diáspora venezolana, recordaron OIM y ACNUR.
