Plenario. Ayer, Miguel Carvajal y Óscar Ledesma, de Alianza PAIS, hablaban en el hemiciclo parlamentario.

Opositores insisten en el juicio a Jorge Glas

La figura de Jorge Glas, vicepresidente de la República y candidato al mismo cargo en las elecciones de febrero, gravitó en la Asamblea Nacional ayer. Aunque él no estaba en el hemiciclo parlamentario, su presencia se sintió al inicio de la sesión plen

La figura de Jorge Glas, vicepresidente de la República y candidato al mismo cargo en las elecciones de febrero, gravitó en la Asamblea Nacional ayer. Aunque él no estaba en el hemiciclo parlamentario, su presencia se sintió al inicio de la sesión plenaria.

La mayoría legislativa le concedió una licencia sin sueldo, por 48 días, para participar en la campaña electoral.

La bancada de Alianza PAIS justificó ese permiso con el artículo 93 de la ley Electoral.

La oposición, mientras tanto, sufrió un retraso en su intento por iniciar el trámite de juicio político en su contra.

Diego Salgado, asambleísta de CREO, no recogió las firmas para llevar al banquillo de los acusados al vicepresidente de la República, como había anunciado. “No estamos completos, faltan muchos legisladores, hay alternos en ambos lados”, explicó a este Diario.

En el Legislativo el inicio de la campaña provocó algunas ausencias.

Salgado, sin embargo, mostró algunos de los postulados para la solicitud de juicio político. Uno de ellos, explica que los sectores estratégicos han estado bajo el mando de una sola persona en estos 10 años: Jorge Glas. En esta década, el vicepresidente ocupó cuatro altos cargos: desde presidente del directorio y gerente general del Fondo de Solidaridad hasta el de segundo mandatario.

En 2007, él “administraba el Fondo de Solidaridad con más de 3.702 millones de dólares, que estaban invertidos en diferentes compañías eléctricas y telefónicas”, dijo el legislador.

Tres meses antes de convertirse en el jefe del fondo, el segundo mandatario firmaba como gerente general de TV Satelital y figuraba como accionista de las empresas Raloin e Ingelectra. “Ambas empresas no se incluyeron en su declaración patrimonial al asumir ese cargo público”, denunció.

Glas, según el recuento del opositor, también siguió de cerca la construcción de los proyectos Toachi Pilatón, Carrizal Chone, Baba y el aeropuerto de Tena. El presidente Rafael Correa declaró en emergencia a estos proyectos por incumplimientos de Odebrecht, encargada de esas obras.

A cargo del Ministerio de Telecomunicaciones, continúa Salgado, Glas fusionó varias entidades. “En 2009 hubo denuncias por los contratos firmados por la CNT por más de 160 millones de dólares, con empresas chinas”, dice el documento expuesto por el asambleísta.

Además, Petroecuador y Petrochina suscribieron un convenio de Alianza Estratégica para el sector hidrocarburífero. También en 2009.

Cuando Glas fue nombrado ministro de Sectores Estratégicos su viceministro fue Rafael Poveda. En 2010, se creó la Empresa Pública de Hidrocarburos del Ecuador (Petroecuador) y el segundo mandatario fue el delegado del presidente en el directorio. La Contraloría observó dos convenios entre Petroecuador y Petrochina, dice.

Ya en la Vicepresidencia de Glas se destaparon los escándalos de corrupción en Petroecuador y Odebrecht. “Es el responsable político por las decisiones y omisiones en esos sectores”, concluyó.

Para Marisol Peñafiel, de PAIS, la oposición primero debe cumplir lo que dice la ley: el juicio político necesita el control de constitucionalidad de la Corte. “Hay que ir allá y no hacer el sainete en la Asamblea”, comentó. Su copartidaria Pamela Falconí aseguró que la oposición hace vocerías políticas porque no tienen elementos jurídicos.