El origen del cacao ecuatoriano se exhibe en España
La exhibición se puede visitar en la Sala de los Bonsáis del Real Jardín Botánico de Madrid, hasta el 7 de julio
El Real Jardín Botánico de la capital española ha organizado la exposición "Una planta de otro mundo", que destaca el viaje físico y simbólico del cacao ecuatoriano.
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Leer másDurante un mes, este emblemático jardín de Madrid contará la historia y los principales hitos de la investigación que respaldan la evidencia y la certificación científica de que el cacao tiene su origen en Ecuador.
Esta muestra resalta la evidencia arqueológica más antigua de la domesticación y consumo de cacao del mundo, a través de objetos de la cultura Mayo-Chinchipe (3500 - 1500 a.C.) en la Amazonía ecuatoriana. Así mismo cuenta con fotografías explicativas y plantas de Theobroma cacao (fino de aroma), que fueron donadas por el gobierno de Ecuador al Jardín Botánico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España.
Una de las comisionadas de la exposición, Sabrina Guerra, historiadora de la Universidad San Francisco de Quito, cuenta la “locura” que significó traer las plantas originarias de Ecuador para poder darle valor al cacao del país en Europa.
“A todos les parecía una locura (a la Embajada y al Jardín Botánico). Contacté al Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias de Ecuador (INIAP) para comentarles de esta idea y me dijeron que era imposible sacar este tipo de plantas del país, primero por su alta importancia económica y luego porque no se sabía si iban a sobrevivir al viaje”, cuenta Sabrina.
Gestionó todos los permisos fitosanitarios en ambos países, un proceso que tardó varios meses. Sin embargo, lo más difícil fue garantizar la llegada de las plantas en buen estado a España. Explica que "las plantas tuvieron que ser trasladadas desde un invernadero en la Costa de Ecuador, y luego llevarlas poco a poco a Quito debido a la gran diferencia topográfica y los cambios de clima y altura en el país. Además, era necesario preparar sus raíces para el viaje, ya que no se permite la entrada de tierra a España, por lo que las plantas debían trasladarse sin ella", señala la comisionada.
Para Ecuador, es un orgullo no solo exhibir sus plantas sino también objetos de importante valor histórico. Un ejemplo de esto es la vasija en la que se encontraron los vestigios líquidos de Theobroma cacao, que son los más antiguos conocidos hasta la fecha.
"Es una maravillosa oportunidad para presentar nuestro país en España y darlo a conocer aún más. Además, es interesante saber que el cacao, que es la materia prima del chocolate, tiene sus orígenes en Ecuador hace más de 5500 años. A través del cacao, podemos entender la historia y el ciclo evolutivo desde que es una planta hasta que se convierte en chocolate en nuestra mesa. Invito a todos a visitar el Jardín Botánico y esta sala de exposiciones para aprender más", dice Wilma Andrade, embajadora de Ecuador en España.
La exhibición, que se puede visitar en la Sala de los Bonsáis hasta el 7 de julio, también relata el viaje de esta especie hacia Centroamérica y su posterior llegada a Europa en el siglo XVI, gracias a los españoles. Además destaca labor histórica de científicos como Juan José Tafalla, Francisco José de Caldas y Alexander Von Humboldt, quienes contribuyeron a dar a conocer esta especie en Europa.
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Leer más"Evidentemente, queríamos rendirle un homenaje porque es un alimento muy especial que ha implicado a lo largo de la historia a millones de personas y queríamos que fuera un homenaje a los botánicos, ya que sus dibujos no son tan conocidos. En la exposición, vemos una serie de trabajos muy esforzados, como las estampaciones o maravillosas descripciones para observar todas las plantas que había, por ejemplo, alrededor del Chimborazo", destaca la comisionada española Vanessa Quintanar, quien es historiadora del arte y especialista en las relaciones entre arte y alimentación.
Representantes del sector privado y visitantes del Jardín Botánico asistieron al evento de inauguración. Allí degustaron vainas de cacao y chocolate orgánico ecuatoriano, además de felicitar la iniciativa y el trabajo historiográfico, artístico y la asesoría científica para la muestra.
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