El papa Francisco ya es octogenario
El santo padre celebra hoy su cumpleaños número 80, tras casi cuatro años de pontificado reformador que seduce a un gran público, pero indispone al sector más conservador de la Iglesia católica.
El santo padre celebra hoy su cumpleaños número 80, tras casi cuatro años de pontificado reformador que seduce a un gran público, pero indispone al sector más conservador de la Iglesia católica.
Ochenta años es la edad de una semijubilación para los cardenales, pues superado ese límite ya no tienen derecho a elegir a un pontífice en un cónclave. Sin embargo, el papa Francisco, “alérgico” a las vacaciones, no está dispuesto a dejar el primer plano.
Su agenda está repleta de ceremonias religiosas, audiencias y baños de multitudes. El papa ha hecho 17 viajes al extranjero desde su elección en marzo de 2013, y prevé para 2017 una peregrinación a Fátima (Portugal), un viaje a India y Bangladés, y quizá otro a África.
Una cadera dolorosa le hace a veces perder el equilibrio, pero no se plantea realmente una posible dimisión si le faltara la energía, como hizo su predecesor Benedicto XVI, de 89 años.
“Sigo avanzando”, lanzó este año, enterrando sus palabras de 2015: “Tengo la sensación de que mi pontificado será breve, cuatro o cinco años”.
Su carácter sonriente desaparece súbitamente cuando critica a una sociedad impermeable ante la tragedia de los migrantes, de las guerras, o a un sistema económico que destruye a los más pobres.
Ayer Francisco, en un nuevo intento de mediación, reunió en el Vaticano al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, y a su predecesor y líder de la oposición, Álvaro Uribe, quienes defendieron, sin ceder en sus posiciones, sus posturas sobre los acuerdos de paz con la guerrilla de las FARC.
Uribe insistió en pedir más reformas al pacto de paz, cuyas normas aprobadas por el Congreso no pueden ser modificadas por los legisladores.