El Plan Vacunarse colapsa en su primer día y pierde el norte
La plataforma en línea trabajó en horario de oficina. Y no atendió. Mientras tanto, 560 rotarios recibieron su primera dosis
No fue una sorpresa. La plataforma habilitada por el Ministerio de Salud para recibir inscripciones para el Plan Vacunarse se mantuvo dentro de los parámetros de normalidad propios de los servicios en línea del sector público: no funcionó. Ocurre constantemente con las páginas del BIESS, el SRI, el Ministerio de Trabajo… En este caso, la plataforma entró en servicio nueve horas después de lo anunciado y colapsó a los quince minutos. Pasadas las diez, el gobierno emitió un comunicado: “La página presenta problemas técnicos por la gran cantidad de visitas registradas”. Normal. Los programadores del ministerio de Salud no tenían por qué imaginar que hubiera tantos interesados en la vacuna contra el coronavirus.
Caída del portal 'Plan Vacunarse' dificulta inscripción de adultos mayores
Leer másMientras tanto, en las redes sociales comenzaba a viralizarse un video que registraba la jornada de vacunación de los miembros del Club Rotario de Guayaquil, ocurrida este fin de semana: un saxofonista acompañado de una pista rítmica despachaba música de ascensor mientras decenas de personas mayores esperaban sentados en un complejo de jardines con piscina. La indignación se prendió como la pólvora y, a media mañana, el Plan Vacunarse ocupaba ya los cuatro primeros puestos en la lista de tendencias nacionales en el Twitter: #PlanVacunarse, #VacunaGate, #ClubRotario y #Vacunas VIP.
La fallida apertura de inscripciones en línea para el Plan Vacunarse, que en esta primera fase contempla exclusivamente a los mayores de 65 años, había sido anunciada por el propio presidente Lenín Moreno en cadena nacional. “El lunes 15 de marzo entrará en funcionamiento”, había dicho. A la medianoche del domingo 14 (cero horas del lunes) las redes estallaron con una primera alerta: cientos de interesados trataron de acceder al formulario de inscripción pero la plataforma no había sido aún habilitada. Dio la una der la madrugada, dieron las dos y la cosa continuó sin cambios. Nadie podía imaginar que un servicio en línea funcionara con horario de oficina: de nueve a cinco. Y así fue.
Lunes, nueve de la mañana. La plataforma del Plan Vacunarse funcionó por fin, pero nomás para mostrar el siguiente anuncio: “Te encuentras en sala de espera, mientras atendemos a decenas de miles de ciudadanos”. Y un contador en reversa: “Tiempo aproximado de activación 00 días, 00 horas, 09 minutos, 30 segundos, 29, 28, 27… Alguien bromeó diciendo que ese reloj señalaba, como en los dispositivos de ‘Misión imposible’, el tiempo que faltaba para la autodestrucción del sistema. No se equivocó. Antes de las nueve y cuarto el sistema colapsó. Y así, colapsado, permaneció hasta el final de la mañana.
“Finalmente ya pude hacer el registro para la vacuna en la página Web del Club Rotario”, bromeó Cuentero de Muisne, un tuitero conocido por sus mensajes humorísticos. Esa organización benéfica difundió un comunicado en el que explica por qué sus miembros “vulnerables” fueron vacunados por invitación de la Gobernación del Guayas y el Ministerio de Salud: porque laboran “en las diferentes fundaciones de atención a pacientes o tercera edad a las cuales nuestros clubes brindan apoyo”.
“No es un privilegio, es un servicio”, defendió Fernando Aguirre, presidente gobernador del Club Rotario, en conversación con este Diario. “Hemos apoyado al Ministerio de Salud a agilitar la fase 1, pasando listas de los voluntarios que tienen más de 75 años y que están trabajando en el campo”. En total fueron 560 rotarios de los once clubes de Guayaquil y Samborondón (incluidos algunos de más de cien años) los que recibieron la vacuna en el Polideportivo de la Universidad Espíritu Santo.