Planificacion urgente
La urbe guayaquileña crece vertiginosamente y con ella el parque automotor, lo que provoca alarmantes congestionamientos en sus principales calles y avenidas.
Es por eso que se necesita con urgencia una articulación eficiente del transporte público masivo, que cumpla con las expectativas ciudadanas y que permita facilitar la movilidad.
Muchas líneas de buses están concentradas en zonas céntricas, mientras que quienes viven en las periferias adolecen del servicio. A esto se suman los factores ambientales, que se ven afectados por la contaminación, en la que se incluyen la visual y auditiva como aspectos que contribuyen al estrés.
Es necesario incentivar al ciudadano a que prefiera usar el servicio público, en lugar de salir en su carro, como se hizo en Medellín, pero este debe ser integrado, amable con el usuario y de calidad. Los pasajeros merecen ser tratados con respeto, así como también viajar en unidades limpias y seguras.
La planificación urbana es cada día más necesaria para combatir el caos que se vive en las calles, tomando en cuenta que cada año se ponen en circulación 60 mil vehículos nuevos. Solo así será posible reducir las graves molestias que ocasiona el tráfico.
