Pole dance: fusion entre danza y fuerza

La popularidad del divertido y con un toque de sensualidad Pole Dance comienza en la década de los 80 y desde entonces se ha incrementado el número de personas que lo practican con el fin de mejorar su estado físico.

Karen Moreira, campeona nacional de la élite femenina del 2016, la describe como una actividad artístico-deportiva en cuyas rutinas se mezclan la danza y las acrobacias. Requiere de un alto nivel de fuerza para hacer los movimientos en la barra sin perder la postura correcta. Las clases son de una hora y antes de iniciar debe hacerse un estiramiento durante 25 minutos con ejercicios funcionales, mancuernas, pesas y ligas. La música es clave en la ejecución de las acrobacias. La elección de la ideal depende de los gustos de cada persona. Moreira aconseja “comenzar con ritmos lentos para que le sea más fácil hacer los movimientos coordinadamente. Es importante transmitir elegancia mientras se baila”, recalca.

Las coreografías se trabajan con el peso del propio cuerpo, por lo tanto los ejercicios son de bajo impacto. Sin embargo, con aprobación médica “también las pueden practicar personas con escoliosis, porque en algunos casos logran aliviar el intenso dolor”, asegura la experta. A quienes manifiesten problemas en el cuello y lesiones en los hombros o rodillas, les recomienda tener precaución.

Beneficios

Tonifica y moldea la figura “porque se ejercitan todos los músculos del cuerpo, en especial de los brazos, piernas y abdomen”, dice Moreira. Desarrolla la flexibilidad y disciplina. Es una actividad unisex que puede practicarse desde los seis años. Cada clase se divide en niveles, en los cuales paulatinamente se va aumentando la dificultad de los trucos y acrobacias.

Datos

-Existen competencias nacionales y mundiales de Pole Dance.

-La vestimenta debe ser corta para que se pueda adherir fácilmente a la piel.

-Hay federaciones internacionales oficiales, como World Pole Dance Federation e International Pole Sport Federation.