A policía asesinado le clavaron un cartel que decía "prohibido extorsionar"
El hecho ocurrió en Los Ríos. La Policía investiga qué pasó y si había recibido algún tipo de amenaza
Ángela Torres Suárez sintió un dolor tan fuerte, como si le arrancaban el corazón del pecho, cuando le avisaron que su hijo César Fabricio Toaza, de 29 años, fue hallado sin vida en una zona rural de la parroquia Febres Cordero en el cantón Babahoyo, Los Ríos. César era miembro de la Policía Nacional en servicio activo, en el grado de cabo segundo y, laboraba para la Sidprobac en Santo Domingo de los Tsáchilas.
Un operativo se complica tras reacción en un barrio
Leer másSegún Ángela, el pasado 20 de octubre su hijo llegó a Babahoyo tras salir franco y alrededor de las 15:30 lo vieron por última vez salir de la vivienda donde habitaba con su madre.
Desde esa noche se reportó su desaparición mediante las líneas de emergencia, pero fue hasta la mañana de ayer que la Policía recibió la alerta del hallazgo de un cuerpo en la vía al recinto Pueblo Nuevo. Tenía las manos y tobillos atados.
Según los peritos de Criminalística al uniformado le dispararon y le clavaron un cartón en la espalda con la frase: “Prohibido robar y extorsionar”. Los agentes realizaron el levantamiento y llevaron al fallecido a la morgue de la capital riosense.
(Te invitamos a leer: Quevedo: tres balaceras en menos de una hora)
A los exteriores del anfiteatro legaron las dos ex esposas del servidor policial. Una de ellas fue Jomaira Díaz, con quién César procreó una niña.
La Policía Nacional se encargó de los trámites funerales mientras que el personal investigativo buscaba más pistas que les ayuden a esclarecer el suceso. Hace tres años César estuvo laborando en Babahoyo y luego recibió el pase a la provincia Santo Domingo de los Tsáchilas.
Para leer más información de este tipo, ¡SUSCRÍBETE AQUÍ!