Glas buscará alternativas a la prisión en audiencia de apelación al habeas corpus
El exvicepresidente intenta dejar la cárcel La Roca
Jorge Glas Espinel, exvicepresidente de Ecuador, mantiene prisión en la cárcel de máxima seguridad conocida como La Roca. Su defensa buscará alternativas a esa medida en la audiencia de apelación al recurso de habeas corpus, negado anteriormente.
La audiencia está fijada para este 20 de agosto de 2024, a las 15:30, en la sala de audiencias 107, ubicada en el primer piso de la Corte Provincial de Justicia del Guayas. Así lo señala la Sala Especializada de lo Laboral de la mencionada Corte en su convocatoria, que consta en el Sistema Automático de Trámite Judicial Ecuatoriano (SATJE).
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Alejandro Lindao (ponente), Nancy Vera y Carlos Pinto son los jueces que integran el Tribunal de Apelación que conocerá la causa.
Glas quiere dejar La Roca
El exvicepresidente quiere que se le cambie la prisión preventiva por otra medida como el arresto domiciliario.
El 5 de agosto, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México solicitaba a Ecuador que, en tanto se emita el salvoconducto, se tomen las medidas humanitarias necesarias para que Glas sea excarcelado y custodiado en un lugar seguro, debido “al crítico estado de salud que reporta”. En una audiencia anterior la defensa de Glas incluso alegó que hay riesgo de muerte de su cliente.
COMUNICADO. “El Gobierno de México solicita salvoconducto para Jorge Glas al Gobierno de Ecuador”.https://t.co/tMp8YaAtE8 pic.twitter.com/LoTsrz4oyd
— Relaciones Exteriores (@SRE_mx) August 5, 2024
No obstante, la Cancillería ecuatoriana ratificó su postura de no conceder el salvoconducto a Glas.
Jhajaira Urresta, asambleísta de la Revolución Ciudadana (RC), presentó este 19 de agosto un escrito al juez ponente.
En calidad de amicus curiae, solicitó que se acepte el recurso de apelación planteado por Glas y se declare que el sistema de rehabilitación no brinda las condiciones para garantizar su salud y su vida.
Pidió que por ello se determine que las medidas alternativas a la privación de libertad serían las únicas vías de solución posibles para garantizar una atención médica, para precautelar su salud física y psiquiátrica.
