La riesgosa interrogante de Verónica Abad en el sillón presidencial de Ecuador
Lo más probable es que Noboa saque licencia si opta por hacer campaña electoral. Dejar el mando a Abad supondrá cambios
Tras la abstención de la Procuraduría General del Estado de pronunciarse sobre el uso de licencia sin remuneración para hacer campaña electoral, establecido en el artículo 93 de la Ley Electoral, al mandatario Daniel Noboa se le agotan las opciones para evitar que su vicepresidenta Verónica Abad le suceda en la presidencia de la República. Noboa buscaba saber si puede o no hacer uso de esa licencia para postularse a las elecciones 2025.
La Procuraduría justificó que carece de competencia sobre sentencias interpretativas de la Corte Constitucional (CC) y que tampoco puede interferir en las funciones del Consejo Nacional Electoral (CNE) por encontrarse en un período electoral.
La sentencia interpretativa 002-10-SIC-CC determinó que los dignatarios que resulten electos ejercerán sus funciones únicamente para completar el resto de los respectivos períodos, por lo tanto, no se trata de un nuevo período computable para el caso de una eventual reelección.
La abstención del procurador Juan Carlos Larrea “es un lavado de manos, que tiene más que un razonamiento jurídico un cálculo notoriamente político porque Noboa no le pidió que interprete la sentencia sino el artículo 93, en consonancia con lo que la CC ya determinó”, observó el constitucionalista Ismael Quintana.
Dijo que el mandatario podría presentar una acción de interpretación en la CC o proponer un proyecto de ley interpretativo al artículo 93, pero en ambos casos el tiempo jugará en contra. Otra opción es que Noboa mantenga su criterio jurídico, inscriba su candidatura y no solicite licencia, según el jurista.
Pero esto no pone en tela de duda que Abad debe encargarse de la presidencia en ausencia de Noboa, como manda el artículo 146 de la Constitución, acotó. En ese caso, Abad asumirá todas las atribuciones de un jefe de Estado, conforme al 147 de la Carta Magna, y no hay norma que blinde lo hecho por la administración de Noboa, explicó Quintana.
Juan Manuel Fuertes, analista político y exsubsecretario de Gobernabilidad, señaló que por decencia si Noboa sí va por la reelección debe excusarse y ser reemplazado por Abad.
Con ella habrían “riesgos” por desajustes en el nivel jerárquico superior de funcionarios de libre remoción y desajustes en el campo fiscal, apuntó.
Podría presentar una iniciativa legislativa para reducir el Impuesto al Valor Agregado (IVA), dejar sin efecto la eliminación del subsidio a los combustibles, eso haría que muchos de los ingresos proyectados no se concreten.
Coincide en que no hay forma de poner candado a las medidas tomadas por Noboa porque quedarían bajo la voluntad de Abad. Cree que el tema del supuesto intento de declarar la incapacidad mental del mandatario y las reacciones del Gobierno son solo parte de una “pirotecnia política” de una relación de “toma y daca” con la oposición.
Otro de los riesgos por el ascenso de Abad a la presidencia es que los mercados internacionales tengan una percepción de inestabilidad socioeconómica y política, y suba el riesgo país, sostuvo el analista político Rodrigo Jordán.
“Se podrían dar cambios en la política económica, social, tributaria y eso no necesita Ecuador en la delicada situación que se encuentra. Lo más peligroso es que Abad podría aliarse a la oposición del actual mandatario, Partido Social Cristiano, Construye y Revolución Ciudadana, para tomar algunas medidas en conjunto”, evaluó.
Por poco tiempo, mientras dure el proceso electoral y la segunda vuelta, el país podría girar a la izquierda para luego retomar la derecha si Noboa resulta reelegido, esto es “inaudito” y cabe reformar la Constitución para que la figura de la vicepresidencia no exista porque “es el principal talón de Aquiles que muchos presidentes han tenido en la historia”, proyectó Jordán. Sugirió no utilizar la vicepresidencia como arma de vendetta política sino pensar en el país.
“Se está viendo un reacomodo de fuerzas en vísperas de la campaña electoral”, según el exlegislador Fabricio Villamar. Tildó de un sinsentido que el Gobierno pida a la Fiscalía investigar el presunto delito de traición a la Patria por el supuesto intento de inhabilitar a Noboa en la Asamblea.
La frase
“Habrían dos tipos de riesgos: desajustes administrativos y fiscales”, Juan Manuel Fuertes, exsubsecretario de Gobernabilidad.
Detalle
Un legislador de ADN, Fernando Jaramillo, pidió a la Fiscalía investigar el presunto delito de traición a la Patria con base a un tuit de Villamar sobre una alerta del presunto intento para declarar la inhabilidad de Noboa.
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