Prefectura
El año pasado, el entonces prefecto Carlos Luis Morales (+) redujo personal, pero volvió a incrementarlo meses después. PERIODISTA : ALFONSO ALBAN FECHA : 20/05/2019 Agencia (ag-extra)FREDDY RODRIGUEZ

La Prefectura de Guayas compra la renuncia de casi la mitad de sus trabajadores en dos meses

Doce millones es lo que cuesta el proceso de desvinculación que empezó tras la posesión de Susana González.

Doce millones de dólares cuesta la salida de 732 personas que ingresaron al gobierno provincial durante los diez años de la administración de Jimmy Jairala (2009-2019) y los 14 meses de la de Carlos Luis Morales, fallecido en junio pasado. La socialcristiana Susana González dijo a este Diario que con la compra de renuncias trata de cortar cualquier tentáculo de corrupción que haya quedado en la entidad de sus antecesores.

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Tras un análisis y valoración del personal, González decidió recortar la nómina de 1.555 trabajadores en 732 personas, en dos tandas, entre las que están 11 personas que renunciaron voluntariamente, 719 que tenían nombramientos provisionales y definitivos y dos que estaban en comisión de servicios.

La primera salida de personal se registró en la última semana de junio, inmediatamente después de que González asumiera la Prefectura del Guayas por el repentino fallecimiento de Morales, mientras él era investigado por el delito de tráfico de influencias, por contrataciones irregulares durante esta pandemia de la COVID-19. De los 301 empleados que se fueron, 129 ocupaban los cargos de directores, subdirectores y coordinadores departamentales.

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La nueva notificación, hecha el viernes 28 de agosto, dejó fuera a 433 personas, sin incluir a los tres fallecidos y quien se acogió a la jubilación.

Un total de 12 millones de dólares es lo que costará la compra de renuncia. Los trabajadores pertenecían entre otras áreas, a los mandos medios y bajos de los departamentos de presupuesto, talento humano, procuraduría síndica, obras públicas, compras públicas, fiscalización, supervisión, planificación y gestión financiera.

Pero este recorte no será el último recorte porque, según González, falta achicar aún más la nómina de trabajadores de una institución que no necesita tanto personal porque para eso debe trabajar de la mano con los municipios y las juntas parroquiales.

Al inicio de la prefectura de Jimmy Jairala (julio de 2009), la entidad tenía 2.300 empleados. Él sacó a 350 personas, pero hizo nuevas contrataciones. En junio de 2019, la nómina era de 2.160 empleados, incluidos los que ingresaron con Carlos Luis Morales desde el 14 de mayo, que inició su mandato, y que al igual que sus antecesores, pidió una auditoría de personal y luego sacó, en agosto del año pasado, a 518 personas. En mayo de este 2020, la nómina ya estaba en 1.555.

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La prefecta Susana González asumió sus funciones hace dos meses con esa misma nómina, en la que incluyó a 196 personas en menos de dos meses, entre ellos 56 directores, subdirectores y coordinadores que pasaron a reemplazar a una parte de los puestos que dejaron las 301 personas sacados en la primera tanda.

Los doce millones de dólares para la compra de renuncias provino de las devoluciones del Impuesto al Valor Agregado (IVA) que ha hecho el Gobierno central a través del Banco de Desarrollo y que permite desde el mes pasado, que estos recursos puedan ser destinados para proyectos de reducción de personal de los gobiernos locales.

Con restas y sumas de personal, la Prefectura del Guayas aún tiene 1.008 personas en su nómina mensual. ¿Cuántos más saldrán y cuántos más ingresarán? La prefecta González asegura que una vez que terminen las evaluaciones y planificaciones internas se tomarán las decisiones. La intención es no dejar una institución con menos de 600 empleados.