Los primeros movimientos en un intenso año electoral

Parece que falta mucho, pero en realidad no lo es tanto. En mes y medio el Consejo Nacional Electoral (CNE) dará inicio al año electoral para los comicios generales de 2025 y algunos actores políticos con aspiraciones saben desde ya que no hay tiempo que perder.

El primer interesado es el propio presidente Daniel Noboa, que ha hecho pública su intención de reelegirse para darle continuidad a su actual periodo, que durará apenas un año con cinco meses. Incluso, antes de posesionarse, en un encuentro con organismos internacionales dejó entrever que busca hacer una buena gestión en lo económico para refrendar su aspiración política.

Aún está por verse bajo qué bandera lo hará. Noboa llegó al poder de la mano de la alianza entre Mover (antes Alianza PAIS) y Pueblo Igualdad y Democracia, pero es el fundador de Acción Democrática Nacional (ADN), agrupación que, en rigor, no existe porque no está todavía registrada en el CNE, aunque está en proceso.

Quien tampoco ha negado que se encuentra conformando una plataforma electoral con vista a las presidenciales de 2025 es Carlos Rabascall, excandidato a la Vicepresidencia por el correísmo, aunque lo haría por otra organización política que aún no está definida.

“Estoy muy agradecido, muy honrado (de haber sido candidato por el correísmo), pero es evidente que Carlos Rabascall tiene su propia identidad, tiene su propio pensamiento. Que Carlos Rabascall tiene una forma de hacer política, no de ahora (...) Lo que estamos proponiendo es un proyecto independiente”, reveló el economista a EXPRESO en octubre pasado.

Lo demás son más percepciones que certezas, con base en lo que se ve. La excandidata por la Revolución Ciudadana, Luisa González, se ha encargado de no salir del ojo público desde que perdió por estrecho margen en la segunda vuelta con Daniel Noboa.

Al interior de esa organización política muchas voces, algunas poco conformes, creen que podría repetir candidatura en 2025, porque además cuenta con la venia del líder de esa agrupación, Rafael Correa.

En las redes sociales opina de todo cuanto puede, especialmente atacando a los detractores del correísmo, a veces dando pasos en falso, pero manteniendo su nombre en el debate público.

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Quien también se mantiene activa es Andrea González Nader, excandidata a la Vicepresidencia junto a Fernando Villavicencio (+). Incluso anunció a mediados de diciembre que se separaba de la agrupación Gente Buena para formar un movimiento civil llamado Fuerza Valiente, que coincide con las letras del nombre y apellido del político asesinado.

Para el político Gustavo Larrea, dirigente de Democracia Sí, es muy temprano para hablar de candidaturas, aunque reconoce que hay actores que se empiezan a proyectar y promocionar en sus justas aspiraciones.

Sin embargo, considera que temas como el caso Metástasis y sus repercusiones en los próximos meses podrían “patear el tablero” electoral y reconfigurar las aspiraciones de actores y agrupaciones políticas, hasta el momento mismo de definir las candidaturas, especialmente las que resulten salpicadas.

Tampoco ha salido del radar público el excandidato a la Presidencia Otto Sonnenholzner, que acude a entrevistas en medios, asiste a eventos como invitado y opina de la coyuntura nacional. Xavier Orti, director de Avanza, una de las agrupaciones que apoyaron a Sonnenholzner en la contienda pasada, considera que es muy temprano para hablar de las proyecciones.

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Henry Cucalón, exministro de Gobierno, no lo asegura, pero tampoco descarta una ‘sorpresa’ en el futuro cercano, porque le “gusta la política” y quiere seguir escalando peldaños. Eso ya no podría ser como candidato a la Asamblea, sino a la Presidencia de la República.

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