A proposito de Semana Santa: instar a todos al arrepentimiento y conversion

Esforzándome siempre para ser un buen cristiano y como conocedor y practicante de la ley de Dios, quiero manifestar que no soy homofóbico. Bajo ningún concepto juzgo por su condición, pues no puedo juzgar a nadie para no ser juzgado por hombre alguno, como dice la Escritura.

Solo Dios es el justo Juez que tiene la autoridad para juzgarnos a todos y en todos los sentidos.

Basta con ser seres humanos, para merecer respeto y consideración. Pero algunas personas, erradamente, tratan de justificar pensando que el homosexual nace, criterio totalmente erróneo y en contra de la ley de Dios (Máxima sabiduría). Un ejemplo: el alcohólico no nace alcohólico, se hace por su propia voluntad.

Lo cierto es que “todos somos pecadores”, unos más, otros menos, pero todos pecamos.

Con mayor razón que estamos en Semana Santa, en que los cristianos conmemoramos la muerte y resurrección del Salvador del mundo, hay que predicar continuamente la Palabra de Dios, ya que todos somos pecadores, exhortando a todos al arrepentimiento y a la conversión, porque Él aborrece el pecado que nos destruye.

Por eso Jesucristo vino al mundo a dar su vida por nosotros los pecadores, para liberarnos de toda esclavitud. (Levítico 18:22). (Rom. 1: 26-28).

“No erréis...” (1 Corintios 6:9-10).

Ab. Carlos A. Cárdenas