Quito se acerca al fin del estado de excepción sin un plan de movilidad
El Concejo municipal no ha recibido a la Secretaría de Salud en las últimas dos sesiones. Los concejales expresan su preocupación
Falta un norte. El Municipio de Quito no termina de definir y aprobar un plan completo para la ciudad después de la finalización del estado de excepción. El 12 de septiembre de 2020, por decisión de la Corte Constitucional y el Gobierno nacional, terminarán las restricciones impuestas para frenar el crecimiento de contagios de coronavirus en el país.
El dato es alarmante en la capital por el número de contagiados. Hasta el 9 de septiembre, según los datos oficiales, Quito era la ciudad con más casos confirmados al registrar 23.217. También lidera los datos de ocupación de camas hospitalarias y de fallecidos diarios.
Números de la Secretaría de Salud evidencian que, hasta la semana pasada, existían hasta 52 pacientes diarios que esperan una cama en las Unidades de Cuidados Intensivos de la ciudad. Además, había 56 fallecidos por semana.
Las pruebas que toma la misma secretaría muestran que la tasa de positividad en la capital es del 21 %. El porcentaje varía, al alza, cada día.
Toda esta información, aunque vital para la toma de decisiones, no ha podido ser expuesta en el Concejo Metropolitano de Quito. En las últimas dos semanas, el Municipio que dirige Jorge Yunda ha preferido tratar temas como el patrimonio histórico y los incrementos de precios en el Metro. En las sesiones del Concejo se ha pospuesto la comparecencia de la Secretaría de Salud.
La postergación fue más evidente esta semana. El martes, los concejales solicitaron información para la ciudadanía, pero el alcalde Yunda dijo que ese tema se tratará cuando la Secretaría de Salud haga su exposición. Ese punto no llegó y la sesión fue suspendida.
La incertidumbre preocupa. El concejal Fernando Morales explicó que ha planteado varias alternativas a las autoridades, pero no hay respuesta.
Él considera que la ciudad, ya sin toque de queda, debe entrar en modalidad de trabajo de 24 horas y siete días a la semana para evitar aglomeraciones. Con turnos para el personal, explicó, y buscando mantener las medidas de bioseguridad.
También sugiere la priorización del uso de vehículos particulares, bicicletas y mantener el teletrabajo como opción principal en los sectores público y privado.
Hasta ahora, el Municipio solo ha emitido un protocolo de retorno paulatino al trabajo presencial para su personal. La semana pasada se publicó el documento que ordena, entre otros puntos, que se mantenga el teletrabajo para la población vulnerable y que se formen dos grupos de trabajo del resto del personal. Una parte de la burocracia municipal irá a la oficina los lunes, miércoles y viernes y otro segmento acudirá los martes y jueves. Ese esquema se alternará según disponga Recursos Humanos del Municipio.
