Se reactiva venta de caretas y monigotes para cerrar 2021
En Quito hay opciones para conseguir artículos tradicionales para despedir el año El palacio de la careta cumple 50 años y ofrece 30 % de descuento
Para todos los gustos, de todos los precios y hasta con descuento. Quienes quieran adquirir una máscara de latex, de papel o de alambre pueden visitar el palacio de la careta que, además, está de cumpleaños.
Su propietario Vicente Paredes, un artista de 73 años, señala que aunque el cumpleaños número 50 de su empresa, que nació en octubre de 1971, no lo podrá festejar con un pastel por las restricciones que ha dejado la pandemia, lo que sí podrá ofrecer es un descuento del 30 % en todos los artículos.
Paredes es oriundo de Píllaro en Tungurahua. En los estantes del taller en el que da vida a sus creaciones dispone para la venta unas 800 máscaras de caucho, unas 400 de cartón y decenas de caretas de alambre, garras y otras figuras que tradicionalmente eran buscadas en estas épocas.
La pandemia le obligó a cerrar el local de exhibición ubicado en una calle céntrica del norte de Quito. Ahora la elaboración y venta se hace en el taller, en el que normalmente dos personas confeccionan las máscaras para fin de año.
Vicente Paredes hasta llegó a pensar en cerrar su empresa. Es que en 2020 fue un año terrible para las ventas, asegura. De las 1.500 máscaras de látex que le compraban antes de la pandemia, en 2020 se redujo a cero. La esperanza del artista para una reactivación económica se ha centrado en estos últimos días del año. Por eso está botando la casa por la ventana con rebajas de 30 % en toda su mercadería, elaborada a lo largo del año y en su propio taller.
En el palacio de la careta hay de todo. Desde las tradicionales máscaras del hombre verde, los personajes de la Guerra de Las Galaxias, Frankenstein, el coronavirus, el hombre lobo, diablos, lobos, gorilas, toros y payasos que no caducan nunca, son entre otras las opciones. Los precios varían. En caucho, 15 dólares cuesta la más barata y con el descuento se puede adquirir a 10.
Hay otras que cuestan 30, 45, 50 y 75 dólares la más cara. Hay 300 modelos diferentes y cada año surgen entre 20 y 30 nuevos modelos para utilizarlos en fiestas y con amigos. Vicente Paredes dice que “necesita que le apoyen y reactivarse”.
Aunque la quema de monigotes está prohibida en la capital, la venta de muñecos no tiene restricciones. Por eso, desde ayer en la avenida América, en el norte de Quito, casi medio centenar de comerciantes de la Asociación 31 de Diciembre puso a la venta sus monigotes, caretas de cartón, pelucas, pestañas y disfraces, tras recibir permisos municipales.
Rocío Romero es una de ellos. Trabaja con su hija y ofrece objetos que cuestan desde 1,50 hasta 12 dólares para los muñecos. Dice que la mercadería procede de la Ipiales, en donde se encuentran los mayoristas. Tiene unos muñecos pequeños que cuestan dos dólares y llama ecológicos por ser de fácil combustión.
A pocos metros se ubica Andrés Medina con productos similares. Los muñecos más grandes dice que fueron traídos de Guayaquil y cuestan hasta 30 dólares. Invita a que lo visiten y ofrece medidas de bioseguridad y distanciamiento.
Personajes preferidos para venta
En la avenida América, entre la Colón y Mariana de Jesús, decenas de diminutos monigotes se ofrecen a los transeúntes.
Unos tienen la foto de Sebastián Yunda, hijo del exalcalde de Quito, Jorge Yunda, investigado por posible asociación ilícita.
Otros representan al presidente Guillermo Lasso y unos últimos están pintados con el rostro del expresidente Rafael Correa, sentenciado por el caso Sobornos 2012-2016 y actualmente prófugo de la justicia.
