Reliquia de Juan Pablo II en Cuenca
La reliquia es un aporte religioso de Patricia Talbot, ‘Guardiana de la fe’ y devota de la Virgen María. Fue ella quien el jueves pasado trasladó el vestigio para entregarlo a los fieles de la parroquia eclesiástica Juan Pablo II de Cuenca, situada en
Una reliquia de primer grado de San Juan Pablo II está desde el fin de semana expuesta en una iglesia de Cuenca. Se trata de una partícula de su sangre, obtenida a través de una muestra médica antes de su muerte, y estuvo en manos de las religiosas Madres Siervas de los Corazones Traspasados de Jesús y de María, de Miami.
La reliquia es un aporte religioso de Patricia Talbot, ‘Guardiana de la fe’ y devota de la Virgen María. Fue ella quien el jueves pasado trasladó el vestigio para entregarlo a los fieles de la parroquia eclesiástica Juan Pablo II de Cuenca, situada en la ciudadela La Católica, en el sector El Vecino.
El recuerdo fue colocado al lado derecho del altar mayor y bajo la imagen del santo que como papa visitó esta urbe hace 31 años.
Es un cofre dorado de plata, redondo y armado con un cordón de seda, y debajo está el sello pontificio, que fue entregado con la autorización de exhibirlo para la veneración de los fieles. La urna especial tiene las normas del Derecho Canónico para exhibir una reliquia con toda la seguridad para evitar su eventual profanación o robo.
Está bajo la protección del párroco Joffre Astudillo. Se ha dispuesto un espacio especial para la urna, dentro de la cual está la pieza de plata con una leyenda en latín: “Ex Sanguine Sancti Joannis Pauli II Papae”, que traducida al español significa: “A partir de la sangre del santo papa Juan Pablo II”.
El regalo llegó de Roma por petición suya bajo el beneplácito del arzobispo de Guayaquil, Luis Gerardo Cabrera. JMJ
