Richard Martinez: “El acuerdo con los jubilados se firmara en las proximas horas”
Los maestros jubilados exigen los pagos pendientes del incentivo a la jubilación, en algunos casos desde 2008.
Las negociaciones fueron largas, pero dieron frutos. La noche del viernes, el representante de los maestros jubilados, Alfonso Yánez, mantuvo un encuentro de más de tres horas con el ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez. Tras la cita, se llegaron a consensos que permiten pensar que se firmará un convenio entre hoy y mañana. EXPRESO conversó con el ministro Richard Martínez sobre los puntos que las partes dejaron de lado en miras de terminar la huelga de hambre de 29 maestros, que hoy cumple 13 días.
- ¿La crisis con los jubilados es el reto más difícil que ha enfrentado el Gobierno hasta ahora?
- Sin duda es un tema complejo por la connotación social. Para nosotros es una prioridad que se resuelva. La realidad es que tenemos unas cuentas fiscales complejas aún, pero creo que en las próximas horas podremos llegar a un acuerdo con un ceder de las partes. No hay imposiciones, sino un diálogo directo con los jubilados.
- ¿Cómo llegaron a este casi acuerdo si los jubilados no querían aceptar bonos?
- Los bonos han sido una piedra angular en esta conversación [la de la noche del viernes]. Nuestra intención es que sean altamente líquidos y con el menor descuento. Por eso tardó la estructuración de esos papeles.
- ¿Cuáles serán las diferencias?
- Que se lo pueda negociar en instituciones públicas, que tenga más demanda en el mercado y así se reduce el descuento. Hasta el viernes se han pagado cerca de 500 bonos.
- ¿Qué condiciones pidieron los jubilados para aceptar bonos?
- No me puedo anticipar porque no quiero poner en riesgo las conversaciones, pero hay formas de reducir el descuento con acciones coordinadas entre el Estado, los actores del mercado y los propios jubilados. En eso justamente estamos trabajando en estas horas.
- ¿Será un bono especial solo para los jubilados?
- Sin duda. El plazo del bono estará ajustado a la edad del jubilado. En efectivo recibirá el de 70 años y lo que se hace es restar la diferencia. Si el jubilado tiene 69 años, ese bono es de un año. Si tiene 68 años, entonces el bono durará dos años.
- ¿Pero ustedes no pueden regular el descuento?
- Prefiero no anticiparme...
- Esta entrevista se publicará en domingo...
- Yo espero concretar el acuerdo el domingo en la tarde porque tenemos que trabajar precisamente en eso. Creo que los jubilados van a tener un papel muy líquido y con una tasa de descuento baja. Lo que hemos conversado con los jubilados es que el pago con bonos será voluntario. Hay, hasta ahora, más de 4.000 subcuentas abiertas en el Banco Central. Solo esta semana se han entregado cerca de 500 bonos.
- Los jubilados reclaman que el IESS y el Biess no aceptan bonos del Estado.
- Esa es una de las propuestas: que con el bono se pueda pagar préstamos hipotecarios y quirografarios. En eso justamente estamos trabajando y soy optimista. Nuestra proyección es que la semana que viene podríamos contar con unos 500 jubilados más que reciban el bono. Eso se canaliza desde el Ministerio de Educación y pasa al Ministerio de Economía. Podrían ser 1.100 en ocho días con los de la semana pasada. Por el tipo de bono, hay interés y mayor demanda de bancos privados y empresas que transan en bolsa. Esa es una de las gestiones que hemos hecho.
- Que el pago se financie con una ley urgente disgustó a los jubilados porque eso no fue lo que acordaron. Ustedes no pueden garantizar que se apruebe.
- El Ejecutivo no puede garantizar una ley, pero sí su envío. Contrario a lo que han dicho varias tiendas políticas, en el acta del 28 de mayo ya se menciona un instrumento y en el acuerdo se dice que ese instrumento puede ser una ley. Tenemos que seguir en el diálogo para decidir si ese es el mejor instrumento. Yo no le cerraría la puerta a la alternativa. El objetivo es tener los recursos para pagar de manera sostenida.
- ¿No es más fácil retirar la línea que dice que se financiará con una ley que afecte a todos los ecuatorianos?
- Sí, podría ser. Eso no sería un problema para nosotros. El objetivo mayor es generar confianza y recuperar la capacidad periódica de pagos. Otra alternativa, que fue aceptada en el acuerdo, es el fraccionamiento de pagos.
- ¿Cómo se fraccionaría el pago?
- En un ejemplo, nosotros teníamos pagos mensuales de unos 15 millones de dólares para unas 300 personas. Entre agosto y diciembre queríamos pagar a 1.200 personas. Acordamos que adelantaremos todo el pago hasta noviembre, cuatro meses. El mecanismo no fraccionado es que 300 jubilados reciben su pago en agosto, 300 en septiembre, 300 en octubre y 300 en noviembre. Con el fraccionamiento se pagará a los 1.200 una cuarta parte de su deuda en agosto, otra cuarta parte en septiembre y así hasta noviembre. Mantenemos el presupuesto, pero pagamos a todos unos 13.000 dólares mensuales, en promedio. Eso es positivo porque los jubilados tienen necesidades inmediatas.
- ¿La ley no era un pretexto para cumplir con el FMI? Algo parecido a lo que se hizo con el terremoto en el gobierno anterior.
- Nosotros estamos haciendo todo lo contrario a lo que hizo el gobierno anterior. Hemos sido muy transparentes y no vamos a disfrazar las cosas. Ese instrumento [la ley] era específico para los jubilados. Eso no quita los planes que el gobierno tiene. Hay una ley que se enviará a la Asamblea con las expectativas. Lamentablemente hay intereses políticos.
- Pero ustedes dieron ‘papaya’ al hablar de una ley. El gobierno debería hacer un mea culpa.
- Hay que ver hacia adelante. En este momento no debe ser el centro de la discusión social lo que se dijo o cómo se dijo. Si la ley incomoda, nosotros no tenemos problema en que el tema se administre desde el Ejecutivo [sin una ley que pase por la Asamblea].
- ¿No les preocupa que la huelga de hambre sea el nuevo mecanismo de reclamo?
- No. La huelga de hambre no es el punto de solución. Lo de fondo es que se busca una solución para los jubilados.
- Si uno de los jubilados fallece, ¿será responsabilidad del gobierno?
- Nosotros hemos estado muy pendientes de los jubilados y todos queremos evitar una desgracia. Yo creo que con el acuerdo que está por concretarse vamos a desactivar esto.
- ¿Cómo evitar que se vuelvan a acumular deudas? Los maestros siguen jubilándose.
- Estamos trabajando en un diseño presupuestario que nos permita cubrir las obligaciones.
- ¿Le preocupa el juicio político? Es una moda contra los funcionarios actuales.
- No tengo temor, al menos en lo personal, porque hemos hecho las cosas con transparencia y haciendo lo que los que firman no hicieron. Corregimos los errores que crearon los que ahora firman ese juicio.