Los rios Payo, Milagro y Bulubulu muestran su fuerza
Desolado y tomándose la cabeza con sus manos de la indignación, Jaiton Baque observaba la avenida principal de su sector, que hoy luce como un océano.
Baque es uno de los cientos de damnificados del sector oeste de Milagro que lo perdieron todo a consecuencia de las recientes lluvias.
Las ciudadelas más afectadas son: Unida Norte, Unida Sur, Los Tamarindos, San José y Margaritas 2. Hasta el cierre de esta edición, bomberos y militares seguían en el rescate. Las Pozas es uno de los sitios afectados del sureste del cantón.
Basándose en un informe técnico, la alcaldesa Denisse Robles sostiene que no se puede declarar en emergencia a Milagro.
Mientras el desbordamiento del río Payo causó que el agua alcance altos niveles y dejó anegadas las vías. El afluente colapsó a la altura del kilómetro 26 en la vía El Triunfo-Guayaquil, dificultando el tránsito.
A más de las lluvias, el alcalde de Yaguachi, Daniel Avecilla responsabilizó del desbordamiento a Consegua, afectando a los recintos La Violeta y San Jacinto . “Solo a la concesionaria se le ocurre romper un muro cuando esos trabajos debieron hacerlo en verano”, manifestó.
El río Bulubulu también se desbordó, poniendo en riesgo a los recintos de yaguachenses: El Paraíso, Nariz del Diablo, La Puntilla, La Bélgica, La Flor de la Esperanza y San Gerardo. La maquinaria municipal y de la junta parroquial aceleraban el reforzamiento de un muro, en espera de disminuir los riesgos de inundaciones.
En Naranjal, la creciente del estero Seco bloqueó la vía al recinto La Delicia.
Parte de la zona periférica de Durán también está bajo el agua, siendo la cooperativa Una Sola Fuerza una de las más afectadas, donde los habitantes caminan en aguas putrefactas. El Municipio se comprometió con ayuda. ATR-JPZ-MUC