Romo busca el eje del dialogo
El Gobierno quiere mejorar los niveles de interlocución con la Asamblea Nacional. Los dirigentes de los trabajadores avizoran nuevos aires para conversar.
Van por el cuarto intento. Pese a ser la carta fuerte de presentación, el diálogo nacional propuesto desde el Gobierno tiene una pata coja en estos 18 meses: no halla la persona que haga el enlace adecuado entre la Función Ejecutiva, los actores sociales y la propia Asamblea.
Con la llegada del nuevo año, el presidente Lenín Moreno prevé hacer un relanzamiento de esta iniciativa. Esa sería una de las razones para los cambios en la Secretaría de Gestión de la Política que se fusionará con la cartera del Interior para formar el Ministerio de Gobierno.
Al frente queda María Paula Romo, que reemplaza a Paúl Granda, a quien le costó encontrar la fórmula de diálogo con la Asamblea, al punto que el propio bloque de Alianza PAIS (AP) se abstuvo de apoyar varias iniciativas que eran de interés del régimen.
Romo no ha perdido tiempo. Sabe que alcanzar acuerdos básicos con el legislativo es vital más ahora que, con las renuncias de algunos legisladores oficialistas para participar en las elecciones seccionales de marzo, sus suplentes podrían dar el salto hacia el ala correísta. En principio serían dos, pero podrían ser más.
Lo primero ha sido llamar o incluso visitar a los coordinadores de las bancadas legislativas en sus propias oficinas. Incluso, la ministra se ha comprometido a enviar a los legisladores, algunos de oposición, documentos e información sobre detalles que les inquieta de la propuesta gubernamental.
“Estoy segura que se pueden alcanzar mejores niveles de diálogo con la Asamblea”, dijo Romo, a finales de esta semana, en una entrevista en radio Majestad.
Esa mejora en los niveles de diálogo y coordinación se empezó a sentir el martes con la elección de Otto Sonnenholzner como vicepresidente con 94 votos de la mayoría de legisladores.
Aunque prefiere no usar la palabra “cabildeo”, la ministra reconoció que antes de esa votación se dialogó con varias bancadas. Incluso pudo reunirse con el Consejo de Administración Legislativa (CAL) en pleno.
“Les presenté los nombres de los integrantes de la terna, sus hojas de vida, sus cualidades y les dije que ojalá la designación sea lo más rápida posible para evitar especulaciones”, manifestó Romo.
Por ese puesto han pasado Paola Pabón, Miguel Carvajal y Granda. Aunque todos han asegurado que su relación con la Asamblea y los actores sociales y políticos registraba avances importantes, sus salidas estuvieron rodeadas por más inquietudes que certezas.
La llegada de Romo es vista como una nueva oportunidad para retomar las conversaciones desde otros sectores. José Villavicencio, presidente del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), considera que entre los nuevos personeros del diálogo hay gente que ha estado más cercana a sus luchas.
El dirigente sindical le dijo a EXPRESO que los anteriores secretarios de la Política “no es que no tuvieron apertura al diálogo, pero fallaron en una cosa: no dieron seguimiento a las demandas que resultaron del diálogo”.
Con los trabajadores la idea es generar, el año entrante, una mesa de diálogo tripartita que reúna al Gobierno, los empleadores y los empleados.
Los protagonistas
Paola Pabón
Fue la primera secretaria de la Política, herencia del gobierno de Rafael Correa, lo que generó recelo entre los sectores que se sentían afectados por la década pasada.
Miguel Carvajal
Fue cuestionado cuando en el bloque de AP no logró un acuerdo para apoyar la gestión del Consejo de Participación. El presidente aceptó su renuncia días después.
Paúl Granda
En sus cinco meses en la secretaría el presidente vetó totalmente la Ley Anticorrupción de la Asamblea y esta devolvió a Moreno el presupuesto para que lo revise.