Con sabor a revancha
Un lugar en la final de la Champions League es razón suficiente para que todos los jugadores estén motivados al máximo. Sin embargo, en los cruces que se conocerán hoy tras el sorteo, hay muchos pendientes que esperan ser resueltos.
Un lugar en la final de la Champions League es razón suficiente para que todos los jugadores estén motivados al máximo. Sin embargo, en los cruces que se conocerán hoy tras el sorteo, hay muchos pendientes que esperan ser resueltos.
En España existe mucha expectativa por un eventual cruce entre los equipos de Madrid. No solo por lo que significa el derbi capitalino y por lo que pasó en la final de Lisboa, hace dos años. También, porque un enfrentamiento entre ambos aseguraría la presencia del país en la final, que será en Milán.
Diego Simeone busca la consolidación de su proyecto, que ha mostrado al mundo que también es posible conseguir éxitos sin la necesidad de llenar su equipo de figuras.
Zinedine Zidane, al frente del Real Madrid, espera conseguir la gloria europea como técnico. Ya lo hizo con los blancos siendo jugador. Para él no hay revanchas, demuestra que está en el cargo por su conocimiento y no solo por su impacto mediático.
Bayern de Múnich intenta sacarse una espina. En Alemania ya no le alcanza con el título nacional. A Pep Guardiola le exigen la Champions League.
Para el técnico catalán hay dos partidos que le darían un sabor especial a las semifinales: Manchester City y Real Madrid.
El primero será una prueba ética porque el City será su nuevo equipo y al frente estarán sus futuros jefes.
Guardiola tiene la espina de no conseguir la Champions en gran parte por los españoles. Real Madrid ya le eliminó en semifinales.
Mientras el City, que pinta con menos posibilidades, quiere dar el salto de calidad que busca desde hace un lustro.