Salud baja el tono de las alertas municipales sobre los contagios
El Gobierno es optimista sobre la reducción del avance de la pandemia. El sistema para procesar datos es antiguo y será cambiado por las autoridades
El optimismo que proyecta el Gobierno con respecto a la situación de la COVID-19 en el país, contrasta con la preocupación que expresan municipios y gremios de la salud por el incremento de contagios por coronavirus en las últimas semanas.
Con un documento para "instruir" al ministro de Salud, los médicos rechazaron sus declaraciones
Leer másEl ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, aseguró ayer que desde el 30 de agosto los casos confirmados van disminuyendo progresivamente al igual que los decesos por la enfermedad. La tendencia no habría variado, según el funcionario, incluso tras el término del estado de excepción, el 13 de septiembre.
Con esto, las autoridades nacionales buscan alejar conceptos como el de rebrote o nueva ola de la enfermedad que es lo que han alertado especialistas y que ha llevado a municipios como el de Guayaquil y Manta a retroceder y a reforzar las restricciones y medidas de bioseguridad tras un aumento de contagios y fallecidos.
No puedo decir que la situación está controlada, pero sí está contenida por las medidas aplicadas.
“Es la realidad, no es teoría, lo digo con la ciencia y los indicadores que nos reportan todos los días, en eso quiero ser objetivo y cuidadoso. Estamos recibiendo reportes de que van bajando los contagios, así como los fallecimientos en las últimas semanas. No se puede descartar una segunda ola, pero las probabilidades son muy bajas, según las cifras que manejamos”, señaló Zevallos.
Sin embargo, las autoridades sanitarias reconocen que existen casos puntuales en algunas provincias que tienen ligeros incrementos como es el caso de Esmeraldas que registra un índice de 1,5, es decir que un individuo puede contagiar a una persona y media.
Otras como Bolívar, El Oro, Los Ríos, Guayas, Orellana, Santa Elena y Santo Domingo están por debajo de esta cifra y lejos de lo que se registraba en marzo o abril que fueron los meses más fuertes de la pandemia, tanto en el número de infectados como de fallecidos.
En el IESS esta tendencia a la baja en los casos se repite, pero hay que mantener todas las precauciones.
Pichincha, en donde se mantienen las cifras de contagio desde hace varias semanas, la tasa está en 0,82, según Zevallos, que reconoció, sin embargo, que estos son números relativos y no son perfectos.
Tal es así que, el domingo próximo, el Ministerio de Salud tiene previsto poner a funcionar un nuevo sistema informático para procesar y emitir los reportes de los casos de coronavirus en el país.
El que se usó durante los meses más críticos de la pandemia data de 2007 y fue creado para atender la propagación del virus del Zika. A través de ese sistema ya obsoleto, más de 2.000 profesionales de la salud del país reportan cualquier enfermedad infecciosa.
“El problema es que este sistema es manual y una vez que se reporta hay que digitar, subir al sistema y en ese proceso se puede perder el contacto de la persona que creo que clínicamente está con la enfermedad. Se dificulta saber si esa persona se hizo una o varias pruebas PCR y de eso hay cientos o miles de personas alimentando esa base”, señaló el ministro.
La cartera de Salud aseguró ayer haber creado esta nueva aplicación con las que ya fueron capacitados todos los laboratorios públicos y privados, así como los médicos tratantes de enfermedades infecciosas para poder estar más cercanos a la realidad, aunque según Zevallos los subregistros siempre existirán.
