Santa Rosa renovo su puerto pesquero
Manuel Mejillones, un septuagenario pescador de Santa Rosa comentaba, junto a un grupo de artesanos, de la transformación que ahora tiene el área de la bahía de este puerto pesquero, que es el segundo de mayor importancia en productividad marítima de l
Manuel Mejillones, un septuagenario pescador de Santa Rosa comentaba, junto a un grupo de artesanos, de la transformación que ahora tiene el área de la bahía de este puerto pesquero, que es el segundo de mayor importancia en productividad marítima de la costa ecuatoriana después de Manta, en la provincia de Manabí.
Para Mejillones y los aproximadamente 4.000 pescadores que diariamente laboran en este lugar, ayer de mañana al fin se hizo realidad la aspiración que tenían desde hacía más de cuarenta años; tener un puerto ordenado, higiénico con alcantarillado sanitario y vías de primer orden.
Las esperanzas de estos trabajadores se habían perdido con el paso de los años pues, aunque en época de campaña para elegir las autoridades seccionales del cantón Salinas, jurisdicción a la que pertenece Santa Rosa, construir las vías del puerto era la principal oferta, hasta ahora, nadie la había convertido en realidad.
“Sinceramente pensábamos que este día nunca llegaría”, relató Mejillones minutos antes del acto inaugural.
Y es que el cambio impresiona. Los olores putrefactos que se percibían en el sitio han desaparecido, ahora los comerciantes laboran de manera ordenada en sus respectivas bodegas, los vendedores de comidas y de productos varios que interrumpían con sus carretillas el paso peatonal y vehicular han sido reubicados hacia el patio de gastronomía típica y atienden de manera higiénica a los comensales.
La vía de ingreso de 650 metros lineales que ahora lleva al puerto fue construida de hormigón rígido para que no se destruya debido al agua salina que cae por la cercanía al mar.
La calle de salida del lugar, en cambio, es de 350 metros de longitud, es de asfalto de tres pulgadas.
Los trabajos empezaron en mayo de este año. Uno de los principales inconvenientes que presentó la obra fue la instalación del sistema de alcantarillado sanitario, esto debido a que debía tratarse de un sistema amplio que soportara la gran cantidad de vísceras que a diario se arroja a esta gracias a la limpieza de los peces.
Al final, se logró, algo que los pescadores aplaudieron, entre ellos Rafael Tigrero.
“Este puerto genera tantos recursos económicos a la península y al país. De aquí salen los peces a los principales mercados de Guayaquil y Quito, no era justo trabajar rodeado de insalubridad. Como la calle siempre fue de tierra el lodo se acumulaba a diario. En verdad, tras tantos años de abandono por fin hemos progresado”, comentó emocionado.
Durante el acto de apertura, el alcalde de Salinas, Daniel Cisneros, explicó que los trabajos ejecutados tuvieron un costo de un millón doscientos mil dólares ( $ 1’200.000), recursos propios de la Municipalidad.
“Esto es fruto de los impuestos revertidos en una obra muy necesaria no solo para Santa Rosa, sino toda la provincia. Con esta regeneración damos un gran paso en el desarrollo turístico que hemos ido obteniendo”, expresó.
Este añadió que, para poder ejecutar las labores, se debió superar varios obstáculos jurídicos, debido a que la misma obra fue contratada por administraciones anteriores, pero no se llevó a cabo.
“Después de tantos años de promesas al fin nuestra gente tiene lo que tanto anhelaba. Este cambio incrementará el desarrollo económico y mejorará la calidad de vida de Santa Rosa”, estableció.