Exigencia. Michael Hoyos (i) y Diego Dorregaray durante una de las intensas jornadas en Rioverde.

Con sed de revancha

Los argentinos Michael Hoyos y Diego Dorregaray esperan ser la dupla ofensiva del Guayaquil City para superar lo hecho en 2017.

Cuando Michael Hoyos despidió el torneo 2017 en el Christian Benítez, jamás pensó que en esos 90 minutos conocería a su próxima dupla: Diego Dorregaray. “En ese partido, (Dorregaray) le pegó una linda patadita a Salchicha Mina y le dije: ¡Pará, cómo vas a patear así! Aparte, no te sirve de nada que te echen si tienes que mostrarte”, recordó el ex Deportivo Cuenca a EXPRESO.

Entre risas y luego de la práctica de ayer en el Centro de Alto Rendimiento en Rioverde (CEAR), el delantero de 25 años rememoró aquel episodio. “Me acuerdo de esa patada, fue lo primero que le dije cundo lo vi, lo recordamos y ahora me pone contento su llegada”, le explicó Dorregaray a este Diario.

Y es que en las prácticas de ayer, Hoyos y Dorregaray fueron inseparables. Desde los trabajos en pareja con pelota hasta los circuitos de resistencia. Siempre unidos, haciéndose bromas, pero al mismo tiempo participando intensamente en los movimientos requeridos. Juntos iban a tomar agua y juntos analizaban cada trabajo. Enfocados en su revancha.

El año anterior, el ariete de Guayaquil City marcó cinco conquistas en 17 partidos disputados, mientras que Hoyos con los morlacos jugó 43 encuentros y anotó en cuatro ocasiones. Quizás no son números muy interesantes para dos atacantes, pero en la tienda del Equipo de la Ciudad creen que esta puede ser una dupla de alegrías.

“(Hoyos y Dorregaray) Son los dos jugadores que tengo en mente. Hay otros que van a tener que pelear el puesto, como (Anderson) Naulita, pero son dos extranjeros y es importante contar con ellos”, manifestó Pool Gavilánez, estratega de Guayaquil City.

Hoyos reveló que en Guayaquil City “no estaré tanto en las bandas como en el Deportivo Cuenca”, ya que el DT le daría la oportunidad “de estar más cerca del delantero, pero en todo el frente de ataque”.

Dorregaray, quien tenía intenciones de quedarse en Argentina por un problema familiar, asegura que “entre más mates (la tradicional bebida rioplatense), más confianza iremos ganando” y que “espero tenerlo como dupla arriba”, algo que ya se dibuja en la cabeza de ambos. Los dos creen que la meta este año es el campeonato y Hoyos apela a su fe: “No hemos jugado juntos porque Dorre llegó ayer y creo que en estos días el técnico tiene planeado juntarnos”.

Hoyos apunta alto y la fe es su argumento. “Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios. Se formó un grupo espectacular. Nos estamos preparando para algo grande”.

Intensidad y resistencia

El equipo de Pool Gavilánez, luego de tener una triple jornada el día miércoles, bajó levemente las cargas el día de ayer con una doble sesión, en la que se trabajó sobre todo la resistencia.

“Hacer la pretemporada en un lugar como este es muy bueno, nos concentramos y el equipo se une más”, declaró Flavio Caicedo. Otro de los referentes del club, Damián Frascarelli, confirmó que “se están realizando trabajos muy duros porque queremos superar lo hecho la temporada pasada. No solo queremos una copa internacional, ahora queremos el campeonato”.

Hoy el club hará doble jornada: a las 09:00 y luego a las 16:00. Su retorno a Guayaquil está previsto para el lunes 15 de enero a las 18:00.