La inusual enfermedad incide en el desempeño y apariencia de las personas que la padecen.

El Sindrome de Werner, la enfermedad que “envejece” a las personas

Esta condición provoca que las partes del cuerpo se empiecen a deteriorar mucho antes de lo estimado.

Imagínese que está en plena juventud y le detectan una enfermedad que hace que parezca del doble de su actual edad. Esta anomalía se conoce como el Síndrome de Werner, nombre acuñado en honor al científico alemán Otto Werner, quien lo descubrió a principios del siglo 20.

Esta atípica condición se hace visible con arrugas, problemas de peso, cabello canoso y calvicie. Asimismo se sabe que causa endurecimiento en las arterias, insuficiencia cardíaca, diabetes e inclusive cáncer.

El Síndrome de Werner es considerado un “trastorno autosómico recesivo”, lo que significa que se muestra, en la mayoría de los casos, cuando una persona hereda de ambos padres una versión mutada de un gen llamado WRN.

Uno de los casos más sonados ha sido el del japonés Nobuaki Nagashima, quien reveló a BBC que esta enfermedad llegó a su vida cuando tenía solo 20 años de edad y sentía que su cuerpo se empezaba a quebrar.

Los síntomas empezaban a hacerse presente progresivamente: cataratas a los 25 años, dolores en las caderas a los 28, problemas cutáneos en las extremidades inferiores a los 30. Tres años después, tras un diagnóstico, se dio cuenta de que la padecía.

Hoy en día, a sus 43 años, Nagashima ha perdido 15 kilos desde que fue diagnosticado. Necesita la ayuda de un bastón para caminar pocos metros y tiene un trabajo temporal en el ayuntamiento. Va a la oficina cuando su cuerpo lo permite, pero trabaja desde su casa cuando no.

El gen WRN fue descubierto en 1996 y desde entonces se conocen pocos casos con relación al síndrome. Desde 2008, se han registrado 1.487 casos en todo el mundo, 1.128 de ellos solamente en Japón. Aunque George Martin, codirector del Registro Internacional del Síndrome de Werner en la Universidad de Washington, estima que la cantidad de casos reales en todo el mundo puede ser siete veces mayor.

Para los científicos, la esperanza de vida de las personas que padecen el Síndrome de Werner llega hasta los 55 años de edad, aunque existen casos de personas que han logrado vivir más tiempo.