Trabajar más no es sinónimo de productividad

Trabajar mas no es sinonimo de productividad

La productividad no se mide con horas de trabajo. Para muestra está Alemania, el país donde menos tiempo se labora (1.371 horas), pero con la hora mejor valuada en el mundo ($ 49).

Ese resultado no sorprende, dice John Cruzatti, coordinador del Observatorio Económico de la Espol, cuando se entiende que el país europeo presume de buenos índices de motivación laboral.

Para Cruzatti, la eficiencia que logre cada país responde a distintos estímulos, que se dan según su realidad: nivel de educación, infraestructura, maquinarias y motivación. En el caso de Alemania, Cruzatti destaca sus políticas de Estado que dan énfasis al desarrollo del bienestar ciudadano, algo que no sucede en países como EE. UU. “que aunque cuentan con ciertos mecanismos básicos de bienestar flaquea en aspectos como el acceso libre y universal a servicios de salud o niveles de defensa al trabajador”.

Los retos de lograr mejor productividad sostiene tienen que ver con el reconocimiento de necesidades locales. Y en países como el nuestro, los desafíos áun están por el lado de la educación y la democratización del conocimiento (liberando por ejemplo el uso de patentes de descubrimientos”.