Un supuesto asalto provocó la muerte de una mujer, en el cantón Urdaneta
Vecinos aplican justicia a mano propia contra presuntos asesinos
Cuando miraba un encuentro deportivo, Graciela Santillán Santillán, de 36 años, resultó víctima colateral de un posible asalto y robo a mano armada, que se registró la tarde del martes 10 de 2023 en el recinto San Antonio, del cantón Urdaneta, provincia de Los Ríos.
Iba a recoger a una niña a la escuela y le disparan
Leer másSegún la información recabada por la policía, dos hombres habían llegado a la cancha del recinto San Antonio y, aparentemente, intentaron robarle la moto a un vendedor de pasteles.
Los sujetos dispararon con una cartuchera y en medio del ataque unos perdigones impactaron en la cabeza y rostro de Graciela, provocando su deceso.
Katy Santillán, hermana de la difunta, comentó que enardecidos moradores persiguieron a los sospechosos que corrieron por unas plantaciones, pero fueron alcanzados a 300 metros. Los maniataron y les dieron varios planazos. Luego les dispararon en la cabeza y dejaron los cuerpos a la intemperie hasta que llegó la policía.
Nadie se hizo responsable de la doble ejecución y los cuerpos fueron trasladados a la morgue de Babahoyo.
Según la información recabada por la policía, los presuntos autores del crimen de la fémina serían Joffre Cruz Roche y Duval Miranda Moreira, ambos de 32 años, oriundos del cantón Ventanas. En la dependencia forense, Paola Muñoz reconoció a su hermano Duval, quien vivía en el sector Los Girasoles, de Ventanas, y era comerciante de cacao. “Este fin de semana nos había dicho que iba a ir a visitar a mamá y ahora ella está que se muere al recibir esta noticia”, manifestó la parienta.
Cerca de las 12:00 de ayer, los deudos de Joffre Cruz, el otro fallecido, llegaron a Babahoyo. Su actual conviviente, Victoria Anzules, relató que él salió alrededor de las 09:00 a laborar como conductor de una tricimoto. Lo esperó con el almuerzo, pero no llegó. “A la medianoche me avisaron que estaba muerto”, relató.
La conviviente del fallecido reconoció a Duval como amigo de su marido, pero dijo desconocer qué hacían en el recinto donde los encontraron sin vida.