Los taxis privados aplican la tarifa que amarillos rechazan
Hay ejecutivos que usan el taxímetro con el valor de $ 0,35 de arranque. Los convencionales no utilizan el equipo porque alegan que ese valor es obsoleto.
En la lucha por lograr rentabilidad para el bolsillo del taxismo privado (conocido como ejecutivo) y los amarillos, ambos gremios se han adaptado de manera independiente a la falta de revisión de la tarifa que tiene 15 años de vigencia.
En ese sentido, los ejecutivos han optado por el uso de aplicativos de teléfono, que simulan un arranque de $ 0,35 igual al del taxímetro homologado por la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) estipulado en la Ley de Tránsito, que el taxismo amarillo se niega a usar.
Para hacer una comparación de los servicios, EXPRESO hizo algunas entrevistas y cuatro recorridos con ambos servicios, con trayecto corto y largo.
A las 10:30 del miércoles, en el primer viaje en un taxi privado, con aire acondicionado, y cabina limpia, que partió desde las instalaciones de este Diario, ubicado en la avenida Carlos Julio Arosemena km 2,5 hasta las oficinas de Interagua, en Lomas de Urdesa (Dr. Enrique Olmos y Los Olmos), el taxímetro de aplicativo marcó un valor de $ 1,89 (redondeada en $ 2). Mientras que, sobre el mismo trayecto, pero sin aire acondicionado, y con escasa limpieza, el conductor de un taxi convencional pactó verbalmente la carrera en $ 3.
Los conductores de una compañía de taxis privados, quienes reservaron su nombre, y de su empresa “por miedo a represalias”, coincidieron en que su trabajo, pese al cobro con taxímetro de aplicativo, les deja buenas ganancias. “Rodando todo el día yo me hago unos $ 70 diarios”, detalló uno.
Del lado de los conductores de vehículos amarillos, el taxista Walter Mendoza reafirmó el no uso del taxímetro por la tarifa desactualizada con la que funciona. “Trabajando unas 6 a 8 horas yo me hago aproximadamente unos $ 25”, contó.
Si bien el arranque del taxímetro homologado coincide con el del aplicativo, el kilometraje sí marca una diferencia de $ 0,40 para los ejecutivos, y $ 0,26 en los amarillos.
Para el experto en transporte y movilidad, Carlos Salvatierra, la rentabilidad no solo se mide en el cobro o cantidad de carreras, sino que existen algunos factores determinantes en la ganancia. La información del recuadro es referencial, y se hizo a base de las declaraciones de los trabajadores de ambas empresas.
Siguiendo el recorrido, a las 13:40, en el trayecto largo, desde este Diario hasta el Mall del Sur, ubicado en la avenida 25 de Julio y avenida Dr. Ernesto Albán, la carrera en el privado marcó $ 4,10. Mientras que en el amarillo, dos conductores ofertaron la carrera en $ 6. Asimismo, las condiciones de viaje no variaron de las descritas anteriormente.
Salvatierra continúa su explicación, argumentando que el no uso de aire acondicionado se relaciona con el gasto de combustible. “Se ha demostrado que quienes no utilizan aire acondicionado recuperan $ 1 de cada $ 5 cobrados en la estación de gasolina”, explica.
Buster Maldonado, líder de la fuerza amarilla, alegó que si se comparaban con los taxistas que usan estas aplicaciones con un kilometraje diferente, están en desventaja.
Mientras que un administrador del privado, quien no reveló su nombre, expresó que la tarifa que usan “marca un valor justo con los usuarios y los conductores”.
Finalmente, el experto en transporte hizo un llamado a los taxistas amarillos para que usen la tecnología a su favor. Y a las universidades para que generen estudios sobre los costos de operación de taxis, que sirvan como base para marcar tasas justas.
