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El temblor sacudio la economia

Se perdieron 21.823 puestos de trabajo en menos de un minuto. El sismo de abril dejó una grieta de más de 1.000 millones en las actividades productivas

El comercio se llevó el golpe más fuerte

De los más de 1.000 millones de dólares que, según los cálculos del Instituto Nacional de Estadística y Censos, que necesitará el sector productivo para reponerse del terremoto de hace un año, el 43 % se lo lleva el comercio. Hasta 449 millones de dólares es lo destinado a recuperar un sector del que viven formales e informales. Y el golpe se lo lleva además una de las actividades más fuertes en los 10 cantones de Manabí y Esmeraldas que se vieron más afectados, ya que el comercio mueve en ventas 3.500 millones de dólares, paga salarios por 148 millones de dólares y tiene activos por 1.137 millones de dólares, según el informe del INEC que desglosa el impacto social, demográfico y económico del terremoto de 7,8 en la escala de Richter. Y eso, teniendo en cuenta que los datos recopilados para valorar las industrias son de 2014, previos a la crisis.

Una merma en las exportaciones de camarón

Manabí es una de las provincias donde el cultivo de camarón sirve de fuente de ingresos para un importante grueso de la población. Sus representantes gremiales, enseguida, encendieron las alertas tras el sismo para evitar pérdidas multimillonarias. Las piscinas en las que se produce el manjar de exportaciones habían sufrido daños y cualquier alteración podría afectar al sensible marisco.

Finalmente, el Instituto Nacional de Estadística calculó que las exportaciones de camarón se vieron mermadas en 35 millones de dólares como consecuencia directa del terremoto. Y como actividad, que se mide junto con la agricultura y la caza en el informe del INEC, ha necesitado unos gastos de reconstrucción que ascendieron a 316 millones de dólares, es decir, el 30 % de los que supuso la recuperación del sector productivo.

$ 170 millones para recuperar la industria

Las industrias llegaron a afectarse al 90 % e incluso en algunos casos al 100 % en los primeros días posterremoto en ciudades grandes como Manta o Portoviejo. Poco a poco, conforme se restablecían los servicios básicos como la electricidad o el agua, esas cifras bajaban. Pero aún así, la manufactura, siendo uno de los pilares económicos de los 10 cantones más afectados, sufrieron severos daños. No se pueden contabilizar los 170 millones de dólares del sector únicamente, pues, como en los primeros días, su actividad depende del buen estado de las carreteras, del servicio de luz y del saneamiento de las aguas. Rubros que se llevaron 862 millones de dólares de la reconstrucción, un 26 %. La manufactura, a cifra de 2014 utilizadas por INEC para medir el valor de lo arriesgado, casi 4.700 millones de dólares y pagan en sueldos casi $ 324 millones.

La cicatriz turística de las playas

La solidaridad estuvo del lado del sector turístico en los feriados del 2016. Tras enviar toneladas de enseres de primera necesidad, los ecuatorianos apostaron por las playas manabitas y esmeraldeñas para sus días de asueto. Había muchos negocios y puestos de trabajo en juego que, por miedo y por la visible cicatriz que dejó el sismo en el paisaje urbano de las provincias, podrían perderse.Tantos como que los servicios de alojamiento de los 10 cantones más afectados el 16 de abril mueven 37 millones de dólares y generan salarios de $ 9,1 millones. Los establecimientos de comida, asimismo, crean empleos por 7,1 millones de dólares y venden 65,6 millones de dólares.El impacto del terremoto, según los cálculos de INEC, le cobró al sector turístico, 87 millones de dólares. Y este año, pese al panorama electoral, espera para Semana Santa tantos visitantes nacionales como extranjeros.