La urgencia de corregir errores en las políticas de seguridad

La urgencia con la que el presidente de la República, Guillermo Lasso, convocó a la reunión del Consejo de Seguridad Pública y del Estado (Cosepe) el lunes, denota una ausencia de políticas que hayan podido alcanzar los objetivos de seguridad mediante acciones prácticas.

Es la opinión del general Luis Altamirano, experto en seguridad y excomandante del Ejército. El oficial (sp) opina que lo primero que debería hacerse es la revisión de esas políticas y una rearticulación de todas las instituciones que trabajan en el área de seguridad, especialmente en inteligencia.

Dice que debería repensarse en las competencias del Centro de Investigación Estratégica (CIES) porque es indispensable que exista una cabeza que permita articular los diferentes sistemas de inteligencia.

Es que, dotar a los ciudadanos de un ambiente de tranquilidad, seguridad y paz, fue uno de los ofrecimientos del presidente Lasso en su discurso de posesión. Altamirano cree que hubo un fracaso de la política de seguridad del Gobierno anterior. Solo en Guayaquil, en lo que va del año, se han registrado 209 homicidios intencionales, según reportes de la Policía. De ellos, el 96 % (201) han sido asesinatos, tres femicidios y cinco homicidios.

Las estadísticas evidencian que en 181 casos el arma de fuego fue la utilizada, en 21 casos fueron armas blancas y en siete otro tipo como destornilladores. Las motivaciones, en lo que va del año, en 132 casos ha sido por tráfico interno de drogas y en el resto fue por amenazas, robo a personas, tráfico internacional de droga, robo a domicilios, trata de personas, secuestro exprés y robo de carros.

En Quito, en lo que va del año aumentaron el robo a motos y a unidades económicas. Y no es solo en Quito. En el país, además del robo a motos en 2021 aumentó el robo de vehículos en un 15 y 21 % con relación a los cinco primeros meses de 2019. Eso a pesar del incremento de las estrategias aplicadas por la Policía.

El general Fausto Salinas, director de Seguridad Ciudadana y Orden Público de la Policía, señala que la institución mantiene los operativos destinados a la emergencia sanitaria con un amplio despliegue.

Además se ha destinado personal adicional a Guayaquil y hay una reorganización de las diferentes zonas en los puntos más críticos. Las unidades especializadas tienen ya investigaciones contra blancos críticos en Guayaquil, señala. Para ello, precisa a EXPRESO el nuevo comandante de la Zona 8, Fausto Buenaño, se han desplazado los directores de la Policía Judicial, Investigaciones y Antinarcóticos y se alternan para el monitoreo de las acciones.

“Tenemos tres ejes: el preventivo, investigativo y de inteligencia. En el eje preventivo el policía está en la calle y así hemos identificado 60 puntos, donde las personas han sido víctimas de asaltos y robo de manera constante. Estos puntos se han reforzado con la presencia de más agentes, además que hemos ubicado personal sin uniforme para investigar y hacer inteligencia”, argumenta.

Pero para la ciudadanía, estas medidas si bien son necesarias no son suficientes. De allí que líderes comunitarios como Carlos Guerrero, hacen énfasis en la necesidad de que se cambie el Código Orgánico Integral Penal. “Si queremos que haya más seguridad, las penas deben ser más duras, incluso para los menores. Y es que si estos matan o intentan matar, como ha pasado, deben entonces estos ser sancionados como si fueran ya adultos”, aseguró.

En reportajes anteriores, expertos en seguridad como John Garaycoa, también máster psicofisiológico, han hecho énfasis en este punto. Han reprochado que aquel delincuente que amenaza a una persona con un arma, sea penado bajo el cargo de tentativa de asesinato. “De la tentativa al asesinato hay un milímetro, hay una decisión de disparar o no, o de disparar y no matar. La pena, por lo tanto, debe ser mayor ...”, ha dicho.

• Medidas a tomar en cuenta

Para el coronel y experto en seguridad Rodrigo Braganza, para reducir los índices delincuenciales es vital además trabajar con la comunidad a fin de recuperar los espacios público. “Arreglar la infraestructura en los barrios, habilitar parques, calles, mejorar la iluminación; hacer que la ciudadanía participe en esos cambios es indispensable. Genera un sentimiento de pertenencia. Esto ya ha dado resultado”, argumenta; al precisar que eliminar la tabla de drogas y desarrollar un verdadero centro de rehabilitación social, son algunas de las mejoras en las que deberá también pensar el actual Gobierno.

"Un verdadero Centro de Rehabilitación Social, debe ser eso: rehabilitarse. No especializarse para cometer delitos. De allí que en ellos se deben realizar actividades recreativas, actividades de trabajo, para que incluso con su trabajo paguen sus alimentos. No debería ya ser como es ahora, que tienen todo gratis", señaló.