Prensa. George Pell y el director de comunicación vaticano, Greg Burke.

El Vaticano apoya al cardenal George Pell

El caso estaba a punto de explotar, pero el papa Francisco confiaba en su inocencia y decidió no apartar a uno de sus hombres más importantes en la Curia Romana, el responsable de Finanzas del Vaticano, George Pell.

Hace semanas que se esperaba la noticia. El caso estaba a punto de explotar, pero el papa Francisco confiaba en su inocencia y decidió no apartar a uno de sus hombres más importantes en la Curia Romana, el responsable de Finanzas del Vaticano, George Pell. El pontífice decidió aceptar el coste y las durísimas críticas que le acarrearía durante este tiempo. Sin embargo, el cardenal fue acusado el miércoles de múltiples abusos sexuales en Australia, según anunció el comisario de dicho país, Shane Patton. Él ha negado todos los cargos y el Vaticano le ofreció su claro respaldo y no exigió su dimisión.

El purpurado, de 76 años, considerado el “número 3” del Vaticano y máxima autoridad de la Iglesia católica en Australia, deberá comparecer el 18 de julio ante el tribunal de primera instancia de Melbourne. Es sospechoso de haber cometido abusos sexuales (no detallados) cuando era sacerdote en la ciudad de Ballarat (1976-80) y cuando fue arzobispo de Melbourne (1996-2001), ambas en el estado de Victoria.

“Estoy esperando que llegue mi día en el tribunal para defenderme. Soy inocente de estos cargos. Son falsos. La sola idea de abuso sexual es aberrante para mí”, dijo ayer en la mañana, en una comparecencia ante los medios, acompañado del director de comunicación del Vaticano, Greg Burke.

Pell explicó que ha hablado mucho con el papa estos días. “La última vez fue ayer (miércoles). Hemos acordado que limpiaré mi nombre en Australia, y le estoy muy agradecido por su apoyo. Quiero limpiar mi nombre y volver a Roma para seguir trabajando”.

El Vaticano respalda a Pell sin ninguna fisura. Con la lectura del comunicado, tras el cual no se admitieron preguntas, no quedó ninguna duda. “La Santa Sede recibe con desagrado la noticia del envío a juicio del cardenal que, en el pleno respeto de las leyes civiles... ha decidido volver a su país. El santo padre le ha concedido un periodo de excedencia para poderse defender”. Pero el comunicado ahonda también en la opinión del papa sobre el cardenal. “El santo padre, que ha podido apreciar la honestidad del cardenal Pell durante tres años de trabajo en la Curia Romana, le agradece la colaboración, en particular por el encargo a favor de las reformas económicas y administrativas y su activa participación en el Consejo de Cardenales (C9)”.

La citación es el resultado de una investigación solicitada por el Gobierno australiano en 2012 en el marco de una serie de respuestas institucionales contra el abuso sexual a menores. Pell, que compareció tres veces ante la comisión de indagación, afirmó haber errado en la gestión de los curas pedófilos en Victoria en los años 70.

El eclesiástico fue ordenado cura en 1966 en Roma, antes de regresar a Australia en 1971, donde ascendió en la curia. En 2014, el papa le eligió para trabajar en la transparencia de las finanzas del Vaticano.

Francisco creó en 2014 la Comisión Pontificia para la Protección de los Menores, con la finalidad de cambiar la ley de silencio de la Iglesia respecto a los sacerdotes pedófilos y plantear propuestas para la prevención. Pero la iniciativa se ha visto enturbiada por denuncias sobre los bloqueos constantes del Vaticano.

El detalle

Orígenes. Pell, nacido en 1941, creció en la localidad rural australiana de Ballarat. Ascendió gradualmente en la curia y en 2014 llegó a ser tesorero del Vaticano.