La llegada del verano activa varios frentes en la capital
Se toman precauciones pese a la inusual época seca con lluvias. Una cuadrilla se encarga de vigilar los árboles con debilidades
Aunque todavía atípico, obliga a tomar medidas adicionales. En medio de días lluviosos y otros soleados Quito transita por la época de verano y las entidades públicas ejecutan acciones para enfrentar eventualidades generadas por los fuertes vientos y el calor excesivo.
La época seca y los ventarrones han hecho que al menos tres árboles de diferentes dimensiones caigan en varios puntos de la ciudad en las últimas semanas. Una cifra menor a la de otros años, pero igual de preocupante para los 16 integrantes del “equipo de podas técnicas” de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop).
Ellos transitan por toda la ciudad, nueve en el sur y siete en el norte, ubicando a los arbustos más frondosos, secos y que representan mayor peligro ya que durante la pandemia no tuvieron mantenimiento.
Lenin Cadena, director de Áreas Naturales de la Epmmop, le dijo a EXPRESO que actualmente se están interviniendo en promedio cien árboles por día y en lo que va del año se ha alcanzado 8.100. “Hacemos un trabajo preventivo y contamos con una matriz de los sitios a los que debemos acudir porque se hacen inspecciones previas”, señaló el funcionario.
Esta es una época que nos permite hacer trabajos para luego enfrentar el invierno.
Aunque el verano en la Sierra va desde junio hasta parte de septiembre, este año las lluvias se han hecho presentes de forma intermitente y los días nublados han sido varios. Pese a ello, el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) sigue reportando radiaciones ultravioleta “muy altas”, lo que obliga a tener más cuidados de la piel.
Luis Collaguazo, gerente de operaciones de la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps), le contó a este Diario que las lluvias han alejado cualquier posibilidad de racionamientos en zonas altas de la capital, porque permite llenar los reservorios, especialmente en las noches cuando hay bajo consumo.
Pero este no es el único tema que la entidad tiene en cuenta durante el verano. También, está aprovechando la época seca para limpiar cerca de un centenar de quebradas, actividad en la cual la ciudad invierte más de un millón de dólares y en la limpieza y mantenimiento de sumideros y pozos de alcantarillado, con un costo de 800 mil dólares al año.
Según explicó la Secretaría de Seguridad brevemente, es que la ciudad cuenta con un plan para hacer frente a estas contingencias durante todo el año y que ahora se está aplicando el eje de época seca. En este participan varias entidades.
La Secretaría Metropolitana de Salud, Fauna Urbana y la Administración Zona Manuela Sáenz (AZMS) empezaron un proceso de control de plagas en los cinco sectores de la jurisdicción Centro, a fin de evitar enfermedades provocadas por la presencia de roedores.
Los incendios forestales, una inquietud recurrente
Algo más de 17 mil metros cuadrados de parques han sido intervenidos dentro de un plan para prevenir incendios en la época veraniega.
Las medidas son un barrido y retiro de material seco e inflamable, mantenimiento a la red de hidrantes, despeje de ruta de emergencia y mantenimiento de línea corta fuegos, entre otras.
Los parques a intervenir con este plan, considerados de alto riesgo por su extensión de bosque secundario, son: Parque Metropolitano Guanguiltagua, Metro Sur, Equinoccial e Itchimbía.
