El vidrio camara da mas confort dentro de las edificaciones

Cuando se habla de cerrarle la puerta al frío, calor, polvo y otros agentes de la naturaleza, solemos pensar en el uso de equipos de calefacción, aire acondicionado y otros productos que nos brinden mayor comodidad dentro del hogar, la oficina o cualquier espacio cerrado. Es posible vivir con aquellas soluciones, aunque al final de cada mes eleven el consumo de energía. Pero hay otras formas de aislarnos del ruido y la climatología, y a la vez bajar el consumo energético. Una de ellas es el vidrio cámara.

Conocido también como unidad de vidrio aislante (UVA) o acristalamiento múltiple, el vidrio cámara es un sistema formado por dos o más láminas de vidrio sin contacto directo entre ellas, dispuestas paralelamente y formando una sola unidad. Esto genera casi el doble de aislamiento que un cristal simple, pues una vez sellado, el material se vuelve hermético. Esta solución reduce el flujo de calor entrante y saliente y como consecuencia se usa menos energía para calentar o enfriar una estancia, lo que implica un consumo energético menor.

La otra gran ventaja de las ventanas, puertas, paredes y hasta cubiertas con doble acristalamiento, es que mejoran el aislamiento acústico al crear una barrera más gruesa entre una edificación y el entorno exterior.

Sorprendería saber que pese a los probados beneficios de la UVA, son muy pocos los países que exigen su utilización en las construcciones. Pero suena lógico cuando, en países como el Ecuador, el también llamado vidrio aislante es poco usado debido a sus costos no accesibles para todos.

Carlos Vergara, asesor del grupo Corpesa y especialista en el uso de vidrios y aluminio, admite que el vidrio cámara casi no se da en nuestras ciudades, salvo en edificios de sectores empresariales, industriales y comerciales. “A nivel residencial es muy poco el uso”.

Las terminales aeroportuarias de Quito y Guayaquil, el patio de comidas de la terminal terrestre guayaquileña, la cubierta del rectorado de la Espol y el techado del moderno edificio del Banco Bolivariano en la vía a Samborondón, son algunas edificaciones importantes y públicas que cuentan con acristalamiento múltiple instalado por las empresas que asesora Vergara.

En el país, los negocios dedicados a brindar este tipo de productos no pierden la esperanza de que muy pronto la UVA tenga más demanda. Una de esas empresas es Termovent, presente en Guayaquil, Quito y Cuenca. Marcos Arias, su gerente propietario, sustenta su optimismo en el hecho de que los beneficios de este producto contribuyen a un mejoramiento de la calidad de vida de la gente.

Pero el material que ellos utilizan es traído de Alemania y eso lo hace un poco exclusivo. “Dar un precio no es fácil, ya que se cotiza por estructura, según el diseño, no por metros cuadrados”, responde al hablar de costos.

Luego se atreve a dar un valor aproximado de una ventana termo acústica: $ 190, incluida la instalación; y una puerta de dos cuerpos, corrediza (210 m por 2m) puede costar mínimo $ 500.

El acristalamiento múltiple protege también de los rayos ultravioleta, cuyos efectos no solo afectan la piel de las personas, sino que decolora muebles, cortinas...

De por sí, el vidrio simple es un aporte a las viviendas y edificios, al permitir apreciar el entorno desde el interior. Lo dice el arquitecto paisajista y exdecano de Arquitectura de la UEES, Rubén Muñoz, quien cree que el vidrio cámara es todavía más ventajoso, aunque por ahora no todos pueden costearlo.

“Es más o menos como hablar ahora de paneles solares para calentar agua -dice- todavía la tecnología es muy cara como para poder masificar este tipo de productos”.

Sepa cómo limpiar sus cristales

Fórmulas

Hay muchas formas de limpiar cristales. Dentro de las fórmulas caseras encontramos la mezcla de agua y vinagre, que desengrasa y da brillo. También mezcle vinagre blanco con amoníaco y agua. Eso evapora y deja mucho brillo.

Los paños

Los cristales también se pueden limpiar con paños que no dejen pelusa o los limpiacristales con goma en el extremo. La ventaja de este instrumento es que no deja huellas y luego solo hay que secar los bordes.

Con aceite

Para limpiar cristales que han quedado opacos con el tiempo solo ponga un poco de aceite de linaza o de oliva en un paño de lana y frote el cristal con él. Deje actuar durante una hora y luego quite el aceite con un papel de seda muy suave.

Los marcos

Al limpiar una ventana empiece por los marcos, si no estos ensuciarán los cristales. Si los marcos son de madera no hay que mojarlos, bastará con un paño húmedo bien escurrido. Cambie el agua cada vez que se ponga sucia.