Vigilancia a carriles de buses
A lo largo de los cinco kilómetros que conforman el corredor vial 2 en las calles Esmeraldas y Los Ríos, 10 cámaras vigilarán la exclusividad de los carriles para la circulación de los buses.
A lo largo de los cinco kilómetros que conforman el corredor vial 2 en las calles Esmeraldas y Los Ríos, diez cámaras vigilarán la exclusividad de los carriles para la circulación de los buses.
Es el primer corredor vial que tiene esta particularidad, doble carril exclusivo a lo largo de las dos arterias de la ciudad, explicó Fernando Amador, director de transporte urbano de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM).
“El corredor 1 no tiene carril exclusivo, y el 3, que está por empezar a señalizarse, tampoco tendrá”, dijo el funcionario.
La instalación de las cámaras permitirá ubicar a los vehículos particulares que circulen por los carriles exclusivos para buses; aunque la aplicación de las multas empezará después de la socialización, que durará un mes.
Sin embargo, en el sector ya existe presión. Varios residentes y comerciantes apostados del lado derecho de las vías no están contentos con la decisión, pues consideran que será un problema para la movilización de quienes van en sus vehículos a sus domicilios o a adquirir algún producto o servicio.
En la esquina de Los Ríos y Gómez Rendón, Rosa Bayas, propietaria de un comercio de químicos, considera que es exagerado el uso de dos carriles solo para buses. “¿Por qué no lo hacen en la (avenida) Machala o en la Quito, que son de seis carriles, y vienen a hacerlo en esta que tiene tres?”, cuestiona.
La comerciante asegura que su clientela ha disminuido, pues tiene miedo de las multas -que será de un salario básico- y del sector.
“Es peligroso. Tenemos miedo de dejar el carro solo, tres cuadras hacia atrás encontramos un espacio y ahí está mi hijo esperando, a mí me toca venir sola a comprar”, enfatiza Narcisa Tumbaco, una de las clientes de Bayas.
Juan Saqui, residente en el sector de Los Ríos y Alcedo, indica que la circulación será un problema. “Yo tengo un carrito, pero me dicen que no puedo parquear al pie de la casa porque no es un garaje cerrado. Entonces, ¿dónde lo voy a dejar?”, se pregunta.
La ATM recepta desde ayer la documentación para otorgar los salvoconductos a quienes tengan su garaje en el interior de las viviendas ubicadas en las calles Los Ríos o Esmeraldas y con ello evitar las multas.
Antonio Mayón, propietario de una farmacia, piensa que el negocio va a decaer. Explica que los clientes deberán aparcar al frente y cruzar la calle o dejar sus vehículos en las intersecciones cercanas “si encuentran lugares disponibles. Pero eso lo único que va a generar es que el cliente busque dónde pueda dejar el carro cerca porque el sector es peligroso”.
El hombre también critica que la exclusividad de los dos carriles rija las 24 horas. “Si ya a las 10 de la noche no pasan buses, por qué deben prohibir que a partir de cierta hora se pueda circular”.
Respecto a eso, Amador dice que el problema de Guayaquil son las excepciones, ya que los usuarios abusan. “Detienen el vehículo y le dicen al agente: un ratito, que ya viene mi esposo, mi hija, con el depósito, que fue al banco; y mientras tanto se genera congestionamiento”.