25 años evangelizando a personas sordas
Dos hermanas crean una oenegé laica que promueve un lenguaje de señas para aprender la fe cristiana
Una meningitis privó de la audición a un hermano de Gladys y Allison Chiluiza Segovia, dos católicas guayaquileñas. Algo que les impuso una tarea en sus vidas: buscar la forma de aprender el lenguaje de señas. En el largo camino de aprendizaje acompañaron a un grupo de personas sordas que practicaban deporte en la iglesia San Juan Bosco, de las calles Carchi, entre Clemente Ballén y Aguirre.
Un café entre santos y actividades religiosas
Leer másPronto se dieron cuenta de algo más. Estas personas no tenían señas para aprender la fe cristiana, por lo que se les ocurrió un reto más fuerte: crear un lenguaje religioso.
Con la ayuda de un televisor que les prestaba el padre Jorge Almeida y algunos videos, estas hermanas empezaron a ver películas religiosas y luego a hacer teatro sobre pasajes bíblicos, creando poco a poco las señas para cada personaje y momento de las Sagradas Escrituras. Una de sus primeras catequesis trató sobre la parábola ‘El Sembrador’.
Tras cuatro años, y con la ayuda del padre Alfredo Villalba, pidieron la bendición de monseñor Juan Larrea Holguín, quien les otorgó el permiso para la creación oficial de la Misión Católica ‘Mi Corazón Te Escucha’ (MICTE).
Un programa que se inició con 15 personas sordas un 25 de septiembre de 1997, en la parroquia Cristo Redentor, con sede en las calles México y Rosendo Avilés, en el Barrio del Seguro.
“Las personas sordas tienen muchas dificultades en su vida cotidiana. Para ir al médico, al banco, en sus trabajos, en las escuelas... porque no hay personas que entiendan el lenguaje de señas y necesitan a alguien que los ayude a comunicarse”, explica Gladys Chiluiza, quien actualmente se ocupa de la coordinación de la MICTE.
Una procesión que le toma la temperatura a la pandemia
Leer másEn 1998 organizaron el primer curso de lenguaje de señas católicas (hoy con más de 4.000 señas) y forman nuevos intérpretes. También programan cursos de catequesis para que las personas sordas reciban todos los sacramentos.
La MICTE tiene casas de formación en las parroquias Cristo Redentor y Santo Tomás Moro.