Aceites naturales: estrellas en el ritual de belleza

Estar en casa sin poder ir a su centro de belleza favorito no significa que debes descuidar la apariencia, vitalidad, brillo y suavidad del cabello y piel. Ahora puedes aprovechar el tiempo de distanciamiento para mimar las citadas zonas con una variedad de aceites naturales que son fáciles de conseguir, expresa Gisel Salvador, dermocosmiatra y esteticista.

Según la experta, se los puede usar para tratamientos faciales como capilares. Las mascarillas y exfoliantes naturales son grandes opciones como apoyo domiciliario, ya que por la situación actual no se pueden hacer sesiones en cabina. “Recuerda que gran parte de la cosmética proviene de productos naturales, el detalle está en saber cómo y qué tipo de producto puede usar dependiendo de su necesidad”, dice Salvador, quien describe cuáles son las propiedades y beneficios de los aceites más solicitados.

Opciones

• Coco: Su elevado contenido en ácidos grasos, vitamina E y K ayudan a restablecer el pH de la piel y lo convierten en un excelente hidratante facial que nutre y aporta luminosidad al cutis. Si tienes la piel seca y sin brillo es ideal para revitalizarla. Al hablar de la salud capilar, este aceite natural se recomienda sobre todo en cabellos con puntas resecas y sin vida, ya que actúa como revitalizante y reparador.
• Argán: Es uno de los más conocidos por mantener la piel suave e hidratada. Este aceite es perfecto para eliminar y prevenir los signos de envejecimiento cutáneo como la aparición de arrugas y líneas de expresión. Se absorbe rápidamente y no es pegajoso. Gracias a su gran cantidad de vitaminas y ácidos grasos es altamente beneficioso para el cabello. Si tu cuero cabelludo está deshidratado y tiene resequedad, frota aceite de argán en las raíces y déjelo un par de horas. Al retirar, después del lavado habitual con champú y acondicionador, vas a notar una luminosidad inmediata. También fomenta el crecimiento del pelo y barba.
• Ricino: Ayuda a controlar el brote de granos en el acné activo, mientras que, aplicado en la piel, contribuye a reducir las estrías, las manchas y a combatir la resequedad. A nivel capilar acelera el crecimiento del cabello, le da brillo y elimina la caspa. También es perfecto para aumentar el grosor y crecimiento de las pestañas. Tiene un alto contenido en minerales, proteínas, vitamina E y omega 6/9.
• Aguacate: Este potente antioxidante ayuda a neutralizar el envejecimiento de las células de la piel y capilares. Por su acción regenerativa actúa en problemas del cuero cabelludo como la caspa, la seborrea o los eccemas capilares. Además, controla la caída del cabello y acelera su crecimiento.
• Almendras: Este aceite, por la cantidad de ácidos grasos que posee, es excelente para tratar diferentes problemas de la piel, sobre todo la resequedad, eccemas o acné. Es hipoalergénico y por eso lo pueden usar las pieles sensibles. Ideal para darle masaje a los bebés. Al cabello lo protege de la radiación solar de manera natural.
• Rosa mosqueta: Es uno de los más utilizados en la cosmética. Contiene propiedades regenerativas e hidratantes para la piel. Combate la aparición de arrugas, es despigmentante, y gran estimulador del colágeno y las fibras elásticas de la piel, por lo que mejora de manera notable cicatrices y estrías.

Modo de aplicación

Utiliza tu aceite favorito, según la necesidad, de preferencia en la noche. Aplícalo en la zona respectiva y al despertar notarás el cambio en su piel. También lo puedes incluir dentro de su mascarilla y exfoliante casero preferido con avena, azúcar y frutas como el banano y la frutilla. Puedes extender su uso al cabello. Coloca en la palma de su mano cerca de seis gotitas y esparza de medios a puntas. Hazlo de dos a tres veces a la semana como parte de tu ritual de belleza.

Atención

No utilices este tipo de aceite en pieles o cabellos grasos, ya que intensificaría esa condición. Es preferible que optes por productos que hagan una limpieza profunda y que controlen el exceso de grasa.

Datos

• Son productos libres de sustancias químicas que resulten perjudiciales para la piel.
• Se pueden beneficiar desde los niños y adultos hasta personas de la tercera edad.