Agustín Silva: "La gente quiere lujo en mayor o menor proporción"
Como diseñador de interior su enfoque no solo es mobiliario. En su lado multifacético destaca su arte en producciones.
En los colores vibrantes, las formas y texturas llamativas está el universo creativo de Agustín Silva. Lo inspiran, y con ello da vida a ambientes.
Formado en diseño industrial mira más allá de su profesión. Puede apreciar desde el arte de Alessi hasta el de Marcel Duchamp.
Detesta los copy-paste de diseños de Pinterest y le fascina la gente que se arriesga al querer decorar.
La exigencia que se pone es alta, pero determina los buenos resultados. Abarca desde el interiorismo de residencias u hoteles hasta de marcas. Con cerca de 15 años de trayectoria, su creatividad lo ha llevado a explorar otras facetas como el diseño de joyas, y lo imparte desde la cátedra.
En diálogo con SEMANA cuenta sobre su estilo y lo que rescata de los espacios en Ecuador en tiempos donde lo tecnológico está en boga.
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La historia de su pasión creativa, es como de otros diseñadores que crecieron en familias de arquitectos. “Mi madre es arquitecta y siempre estuve familiarizado con patrones, colores… Yo salía de la casa viendo las paredes blancas y cuando regresaba estaban rojas, turquesas o con papel tapiz. Siempre ha sido abierta a los cambios” dice sobre Mariela Turner de Silva.
Esa influencia hizo que se encamine al diseño industrial que luego lo aterrizó en diseño de interiores. Empezó trabajando en Tempo Design hasta que después dio el salto a lo propio.
Una de las ventajas que tiene Agustín al trabajar en este rubro es el constante acceso a las tendencias a nivel internacional.
“Pienso que mi gusto ha sido el gran attach (vínculo) que puedo tener con los clientes. La apertura de mente, y el ir por propuestas diferentes… Así el cliente sea clásico, el diseño se lo voy a proporcionar con colores, formas y texturas que encierren una experiencia”
Esta pasión creativa hace que sus servicios no sólo destaquen en la esfera de Samborondón sino en otros puntos, donde salen proyectos mas ambiciosos como Cuenca, Quevedo, Babahoyo, que por el hecho de ser grandes obras, las trabaja en sociedad con Erik Lilliegren.
Desde un refresh o retoque hasta un diseño completo de residencias o negocios, son el lienzo para que se explaye. “Hago las veces de psicólogo para conocer en serie de preguntas su estilo de vida, gustos y lo que les gustaría tener en sus espacios; desde cómo les gustaría abrir sus cortinas hasta cómo apagar las luces…” enumera sobre estas conversaciones de horas en donde está a flor de piel el proceso creativo para que quien habite allí tenga una mejor calidad de vida.
El poder de lo elegante
Una de sus pasiones es recorrer tiendas de decoración o de materiales de acabado. No solo para conocer lo que ofrece el mercado local sino como parte de su docencia pues sus alumnos van con él.
“En Ecuador me doy cuenta que a la gente le gusta lo elegante. No quieren muchas veces lo que tiene el vecino o el amigo. Sino que tengan identidad propia. Pero la consigna es que quede elegante. Quieren lujo en mayor o menor proporción”, dice sobre el comportamiento de la gente al comprar.
Frente a esto hay un común denominador en los espacios de Guayaquil. “Hay muchas casas eclécticas, y a qué me refiero con esto… A la mezcla de lo nuevo con lo que heredan que justamente son de varios estilos. Y ahí es donde toca crear identidad para que los espacios queden lo más armónico”.
El reto también es acoplarlo con las nuevas tecnologías. “Todo lo tecnológico está en boga”, refiere, sin embargo sugiere no apostar por una casa totalmente tecnológica, sobre todo en los tiempos que corren donde se debe hacer conciencia del uso energético. De todas formas, a la hora de trabajar no se priva de usar la IA, “ justamente para conceptualizar en base a las referencias que uno les de”, dice.
Pero su enfoque no solo es mobiliario. Para él es muy importante ponerse a sí mismo nuevos retos y tomar distintos proyectos y ahí cuando sorprende. En diferentes ocasiones ha participado en la decoración de spots en producciones fotográficas de hogar en tiendas como Marriot, De Prati, Tempo Design o Estuardo Sánchez. Tener nuevos horizontes hace que abrace esa cualidad artística.
Cara a cara
- Inspiración: Ir a museos… Me encanta viajar e ir directo a un museo.
- Artistas que le fascinan: Marcel Duchamp. Su filosofía se mantiene con el tiempo. Hay quienes me preguntan cómo me puedo emocionar con sus obras, pero eso es el arte.
- Su primer trabajo: El departamento de arte que había en el Malecón 2000 para desarrollar exposiciones.
- Su primer proyecto solo: La discoteca de un amigo. La tenía en Montañita y al traerla a Guayaquil, le hice el diseño de interior.
- El peor error de los clientes: Mostrar una foto de Pinterest y querer que se le haga algo así.
- Un color: Nude color.