Antonio Plaza: Ser padre, el mejor regalo de Dios

Desde que inicia la conversación se aprecia cuánto le importa una familia unida. Es Antonio Plaza Rosales, el reconocido arquitecto e interiorista quien ha recibido a SEMANA en la calidez de su hogar.

Al recorrerla con él, sus espacios invitan a la calma y a pausar el ritmo diario. Son aquellos en donde con sus hijos, esposa y el resto de sus familiares le gusta compartir momentos, y las reuniones por el Día del Padre no son la excepción.

Es así que, rodeados de esos ambientes donde destaca su estilo único, nos adentra en las anécdotas de su faceta más importante, el ser padre.

Armonía entre trabajo y paternidad

El día que se casó con Nicole Mathis, y los nacimientos de Antonio y Nicolás, marcan las fechas más especiales de él. “Cuando diseñé los planos de este lugar ya pensaba en función de familia”, recuerda.

Dentro de los rincones, se puede apreciar una pequeña capilla donde resalta la Virgen de Lourdes. “Ese es el corazón de esta casa, ahí se han podido celebrar los bautizos y confirmaciones no solo de mis hijos sino también de mis sobrinos”.

Si bien cada ambientación tiene adornos con diferentes historias, hay aquellos que fueron adquiridos en sus primeros años como padre.

“Antonio y Nicolás desde chiquitos iban con mi esposa y yo a los anticuarios. Y desde ahí nunca dejaron de ir. Viajan conmigo y lo disfrutan”.

Aun cuando en la decoración destaque lo clásico, Antonio dice que se reinventa día a día según las tendencias y le va agregando detalles más arriesgados como una escultura moderna.

Cuando se le pregunta por su lugar preferido, cuenta que es la terraza. “Hoy por hoy, con mi familia nos gusta reunirnos ahí . Esa la usamos como espacio para contarnos cómo nos fue durante el día mientras comemos o tomamos algo”, dice.

Es así como logra conectar con armonía su vida laboral con la familiar. “Ser papá es el regalo más grande que Dios te puede dar, pero al mismo tiempo es un trabajo 24/7. Soy un padre presente que siempre está abierto al diálogo, y creo que eso hace una relación más fácil con ellos. Uno aprende también de los hijos”.

De estilo propio

Así como Antonio se arriesga al momento de hacer interiorismo, él plasma lo mismo en su imagen.

Ya sea que lleve piezas heredadas o propias, le pone su impronta.

Sin embargo, en él también resaltan elementos que dice son de protección. Las piedras naturales se vuelven protagónicas en sus collares o pulseras.

“Creo mucho en la energía y la fuerza que estas pueden aportar. Hacen que el día sea más grato; o ayudan a estar más despierto y creativo”.

De ahí que hay ocasiones en las que suele llevar consigo aquellos que tienen cuarzos, ojo de tigre, entre otros.

Y demuestra así cómo lo clásico y moderno pueden convivir no solo en decoración sino también en imagen.

Favoritos entre padres e hijos

• Un lugar para ir en familia: nos encanta la playa.
• Una canción: En los viajes que hacía con mi padre por carreteras, recuerdo los boleros que él ponía, y hasta ahora me gusta escuchar.
• Cosas que comparten: Me gustan los relojes y soy coleccionista.Mis hijos se ponen uno que otro de los míos. Mis camisas también suelen ponerse. Sobre todo Nicolás.
• Serie que están viendo ahora: Outlander. Pero también nos gustan las españolas.

Sus imprescindibles

• Accesorio primordial: El pañuelo.
• Marca que aprecie: Gucci en correas y zapatería.
• Un diseñador ecuatoriano: Tengo chaquetas de Gustavo Moscoso.
• Su perfume: Creed. Lo uso desde hace 25 años.

Personal

• Guayaquileño de 52 años.
• Casado con Nicole Mathis y padre de Antonio (20) y Nicolás (18)
• Arquitecto e interiorista.
• Con más de tres décadas de trayectoria se ha destacado a nivel nacional y ha comple-mentado con trabajos en el exterior.