Los artistas ucranianos siguen creando contra los estragos de la guerra
Lejos del frente, Leópolis alberga a creativos que presentan sus obras
La invasión rusa en curso no ha silenciado a los jóvenes artistas ucranianos, que canalizan sus sentimientos y experiencia de la guerra en el arte, mientras que la vida cultural de Leópolis sigue vibrante contra viento y marea.
Estados Unidos enviará una nueva remesa de armamento a Ucrania
Leer más(LOS INVITAMOS TAMBIÉN A LEER: Banksy, el artista urbano, pinta siete murales en Ucrania)
Lejos del frente, la ciudad ha albergado a muchos ucranianos desplazados, incluidos artistas profesionales. Las muchas galerías de la ciudad han tratado de apoyarlos después de que la guerra cambiara sus vidas.
“La ansiedad nunca desaparece”, dice la joven de 28 años Marharyta Zhurunova, de Vinnytsia, en el centro de arte ‘Jam Factory’, donde ella y otros artistas presentaron las obras que crearon durante el programa ‘Navegación’, con el objetivo de ayudarlos a integrarse en Leópolis.
Varias docenas de espinas gigantes de rosas salvajes sobresalen en dos paredes adyacentes, en una adaptación de la obra de ‘land art’ de Zhurunova y representan la ansiedad que sienten la artista y su coautor, Bohdan Lokatyr.
Vuelve una de las mayores ferias de Leópolis, bajo el signo de la guerra
Leer más“Incluso cuando estoy en el extranjero, cuando me piden que cree algo que no esté relacionado con la guerra, simplemente no puedo. Porque todos mis pensamientos giran en torno a eso”, dice Zhurunova, cuyo padre, de 56 años, lucha en las filas del ejército ucraniano.
(LOS INVITAMOS TAMBIÉN A LEER: Una bailarina sobre 9.000 cartuchos en Madrid)
A algunos artistas les ha resultado extremadamente difícil seguir trabajando, dice ella. Sin embargo, para Zhurunova y muchos otros, el arte se ha convertido en un salvavidas. “Quizás en nuestro caso el arte nace de la impotencia. Te sientes impotente, pero aún sientes la necesidad de hacer algo”, explica. Hay otras obras recientes de Zhurunova también exhibidas en la galería ‘Dzyga’ bajo el título ‘Sálvame. Ayúdame. Protegeme’.
Kostiantyn Zorkin, el comisario de la exposición, cree que si bien podría parecer que no hay lugar para el arte en medio de la guerra, con su “horror, odio y dolor paralizantes”, precisamente ahora “el arte está volviendo a su poder mitológico y habilidades mágicas”.
“El artista, como millones de mujeres y hombres ucranianos, busca apoyo interior, necesita protección y recurre a las poderosas fuerzas antiguas en busca de ayuda”, explica Zorkin.