¿Cómo evitar que se dañe la comida durante los cortes de luz?

Los cortes eléctricos pueden causar diversos inconvenientes dentro del hogar, entre ellos, el daño de los alimentos dentro de las refrigeradoras y congeladores por su descongelamiento. Por eso, la ingeniera en alimentos Grace Carriel, analista de soporte técnico alimentario, detalla a SEMANA varios consejos prácticos para minimizar el riesgo de contaminación alimentaria y asegurarse de que sus alimentos permanezcan seguros y frescos para el consumo.

Qué hacer si se va la luz

Una vez que inicie el corte eléctrico, mantenga su frigorífico sin abrir el mayor tiempo posible. La temperatura fría en una refrigeradora cerrada (la temperatura óptima es de 0 a 5 grados Celsius), se puede mantener hasta por cuatro horas.

En el caso del congelador, la temperatura óptima es de -18 grados Celsius. “Si está lleno, el frío puede durar 24 horas. Si está a la mitad de su capacidad, pueden pasar hasta 48 horas sin que los alimentos se descongelen”, dice Carriel.

Tips para preservar sus alimentos eficientemente

1. No sobrecargue su frigorífico. Opte por hacer las compras de alimentos semanalmente, no mensuales.
2. Separe los alimentos crudos de los cocinados para evitar la contaminación cruzada.
3. Coloque bolsas con hielo, geles refrigerantes o hielo seco junto a las proteínas y lácteos para que mantengan su temperatura en la cadena de frío en la refrigeradora (temperatura constante que debe mantener un alimento antes de ser consumido para asegurar su calidad y seguridad).
4. En el refrigerador, utilice envases o recipientes de vidrio y herméticos para conversar el frío por más tiempo. En el congelador, opte por los de plástico.
5. Guarde sus alimentos en pequeñas porciones para evitar el desperdicio y cambio constante de temperatura.
6. Guarde las verduras y hojas verdes (como la albahaca y la espinaca), envueltas en papel toalla dentro de un envase. Esto evita que se sequen y se mantengan frescas por más tiempo.
7. Al regresar la luz eléctrica, verifique si algún alimento tiene signos de deterioro (mal olor o cambio de textura). Si tiene dudas sobre alguno, es mejor desecharlo para prevenir enfermedades alimentarias.

Por último, no olvide leer siempre las etiquetas para conocer el modo de conservación recomendado para cada alimento, si es mejor hacerlo en el frigorífico o en la despensa en un lugar fresco.

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