
¿Dejaste los anticonceptivos? Guía para aliviar los síntomas
¿Tienes cambios en el ciclo menstrual, acné o alteraciones en el estado de ánimo? Aquí te explicamos por qué y qué hacer
Dejar los métodos hormonales de anticonceptivos puede presentar algunos síntomas incómodos en los días o meses posteriores a su uso. El conjunto de estas molestias llevan como nombre síndrome post control de natalidad. Es un término no reconocido oficialmente en la literatura médica, pero muchas mujeres han reportado una serie de cambios físicos y emocionales tras suspender el uso de estos fármacos. Aunque no se trata de un diagnóstico formal, es una preocupación frecuente, y entender lo que sucede en el cuerpo puede ayudar a manejarlo con mayor tranquilidad.
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Este concepto fue popularizado en 2019 por la Dra. Jolene Brighton, quien ejerce en el campo de la medicina alternativa. En su libro, describe una serie de cambios físicos y psicológicos que pueden presentarse tras la interrupción de los anticonceptivos hormonales. Sin embargo, tanto las ginecólogas Mariela Andrade-Euvin como Cynthia Salazar coinciden en que estos síntomas no constituyen una enfermedad ni una condición médica peligrosa.
“No es un ‘síndrome’ como tal, es una forma de referirse a un conjunto de síntomas que pueden presentarse después de dejar un anticonceptivo”, explica la Dra. Andrade-Euvin.
Los anticonceptivos hormonales regulan artificialmente el ciclo menstrual, por lo que al dejarlos, el cuerpo necesita tiempo para recuperar su equilibrio natural. Durante este proceso de adaptación, algunas mujeres pueden notar cambios en su cuerpo y estado emocional, lo que puede resultar inquietante.
Síntomas comunes
- Alteraciones en el ciclo menstrual: ausencia de menstruación, ciclos irregulares o sangrados abundantes. Estudios han demostrado que la menstruación puede tardar en regularse entre 3 y 6 meses después de suspender los anticonceptivos orales. “Algunas mujeres han reportado presentar falta de menstruación o ciclos irregulares después de suspender los anticonceptivos”, señala la Dra. Andrade-Euvin.
- Cambios en el estado de ánimo: irritabilidad, ansiedad o depresión leve. Según un estudio publicado en The Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism, los cambios hormonales pueden afectar los niveles de serotonina, lo que influye en el estado de ánimo. “Puede haber irritabilidad, ansiedad e incluso depresión leve, pero es importante saber que son cambios transitorios”, comenta la Dra. Salazar.
- Problemas dermatológicos: acné o caída del cabello. La interrupción de los anticonceptivos puede aumentar la producción de andrógenos, lo que provoca brotes de acné en algunas mujeres. “En algunas pacientes se observa caída del cabello o brotes de acné debido a los cambios hormonales”, menciona la Dra. Salazar.
- Alteraciones en la libido: disminución o aumento del deseo sexual, dependiendo de cómo el cuerpo regule la testosterona y estrógenos post-anticonceptivos.
- Dolor pélvico y sensibilidad mamaria: algunas mujeres pueden experimentar dolor abdominal bajo o sensibilidad en los senos mientras el cuerpo intenta restablecer el equilibrio hormonal.
- Aumento de peso y problemas digestivos: aunque el aumento de peso no es común, algunas mujeres reportan retención de líquidos o cambios en la microbiota intestinal. “Algunas mujeres pueden notar cambios en su peso o problemas digestivos, aunque estos no son síntomas tan comunes”, señala la Dra. Andrade-Euvin.
¿Cuándo acudir al ginecólogo?
- Si los síntomas persisten por más de seis meses, especialmente los trastornos menstruales. Un estudio en Obstetrics & Gynecology indica que el 80 % de las mujeres recuperan su ovulación dentro de los primeros tres meses, por lo que ciclos ausentes o irregulares prolongados pueden requerir evaluación. “Generalmente, la sintomatología cede al cabo de unos pocos meses, pero si persiste o se torna más intensa, es necesario buscar ayuda profesional”, aconseja la Dra. Andrade-Euvin.
- Si se presentan sangrados muy abundantes o prolongados que interfieren con la calidad de vida. “Algunas pacientes pueden tener sangrados más abundantes de lo normal y, en estos casos, es importante acudir al ginecólogo para descartar otras causas”, indica la Dra. Salazar.
- Si hay signos de problemas hormonales más severos, como hirsutismo (crecimiento excesivo de vello), síntomas persistentes de ovario poliquístico o fatiga extrema.
- Si existe preocupación por la fertilidad. Según investigaciones, la fertilidad se restablece en la mayoría de las mujeres en un plazo de 12 meses tras suspender los anticonceptivos. “Es un mito que los anticonceptivos causen infertilidad, pero si hay dudas, siempre es mejor consultar con el especialista”, aclara la Dra. Salazar.
Alivie los síntomas así
- Alimentación balanceada: incluir frutas, verduras, grasas saludables y alimentos ricos en fibra para favorecer la salud hormonal.
- Ejercicio regular: la actividad física moderada mejora la regulación hormonal y el estado de ánimo.
- Control del estrés: prácticas como el yoga, la meditación o la terapia psicológica pueden ser beneficiosas.
- Suplementos vitamínicos: en algunos casos, los ginecólogos pueden recomendar vitaminas y minerales, como el magnesio y la vitamina B6, que ayudan a equilibrar los niveles hormonales . “Mantener un estilo de vida saludable es clave para restaurar el equilibrio hormonal”, enfatiza la Dra. Andrade-Euvin.
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