Divorciadas, filántropas y millonarias
Sus matrimonios terminaron, pero continúan con una vida llena de lujo y placeres. Todas tuvieron algo en común: se casaron con creadores de fortunas.
Llegaron al altar con quienes creían eran el amor de sus vidas. Sin embargo, problemas irreconciliables o infidelidades hicieron que los matrimonios de estas tres mujeres no continúen ‘hasta que la muerte los separe’. Conozca la historia de las exesposas de tres de los magnates más importantes del mundo.
Mackenzie Scott
Nació en San Francisco y estudió Filosofía Inglesa en la Universidad de Princeton (Nueva Jersey). Aunque estudió en el mismo instituto al que asistió su exesposo Jeff Bezos, no se conocieron hasta 1992, cuando ella trabajó para él en Nueva York. Casi un año después se casaron y se mudaron a Seattle, Washington. En 1996 Bezos creó Amazon sin saber que 25 años después ese proyecto lo convertiría en la persona más rica del mundo, con un patrimonio de más de 205 mil millones de dólares. Durante sus años de relación, Scott y Bezos tuvieron cuatro hijos (una de ellas adoptada en China).
En el 2019, ambos anunciaron en Twitter a través de una declaración firmada conjuntamente que ponían fin a su matrimonio. Ese mismo año se hizo pública la infidelidad de Bezos con la presentadora Lauren Sánchez. Tras la ruptura, sin haber un acuerdo prenupcial, Scott se convirtió en multimillonaria con una fortuna de más de 67 mil millones de dólares (obtuvo el 4 % de las acciones de Amazon). A partir de su divorcio, Scott se ha caracterizado por ser filántropa y regalar gran parte de su dinero a organizaciones benéficas. Durante los últimos meses, según el diario El Mundo, ha donado más de cuatro mil millones de dólares a 350 organizaciones sin fines de lucro en todo el mundo. En marzo de este año, la empresaria de 50 años contrajo matrimonio con Dan Jewett, el profesor del colegio de sus hijos (Lakeside School), donde también estudió de joven Bill Gates.
“Estoy casado con una de las personas más generosas y amables que conozco, y me sumo a ella en el compromiso de destinar su enorme riqueza para ayudar a los demás”, dijo Jewett a través del portal web The Giving Pledge. Por su lado, luego de conocer la noticia, Bezos declaró a través de un comunicado: “Dan es un gran tipo, estoy feliz y emocionado por los dos”.
Slavica Radic
La exmodelo, de 63 años, proveniente de una familia humilde en Croacia, disfrutó desde joven de la moda, los viajes y las competiciones de carros de carreras. Esta última pasión fue la que la unió a Bernie Ecclestone, otrora director ejecutivo de la Fórmula 1.
El magnate la conoció mientras trabajaba en un evento promocional de la casa de moda Armani, en el Gran Premio de Italia de 1982. A pesar de la diferencia de edad (28 años) y la barrera del idioma (ella hablaba serbocroata e italiano, y él solo inglés), se casaron cuando Slavica tenía 27.
A raíz de su matrimonio, tuvieron dos hijas (Tamara y Petra) y dedicó la mayor parte de su tiempo al cuidado de ellas. En el 2009 se separaron y ella se quedó con cerca de 740 millones de dólares (el patrimonio de Ecclestone supera los tres mil millones).
En diciembre de 2019, Radic puso a la venta su mansión en Chelsea por 100 millones aproximadamente, después de que la casa de su hija Tamara en Kensington Palace Gardens sufrió un robo en el que perdió joyas valoradas en 50 millones de dólares.
Actualmente lleva una vida alejada del ojo público. Aprovecha su dinero para viajar por el mundo y, en ocasiones, ha sido vinculada con donaciones para causas benéficas.
Melinda Gibson
La experta en informática y economía de la Universidad Duke conoció a Bill Gates, fundador de Microsoft, en 1987, cuando entró a trabajar en dicha compañía tecnológica. Siete años después, se casaron y tuvieron tres hijos (ahora todos son mayores de edad). Melinda forma parte del directorio del diario The Washington Post y trabaja a favor de la equidad salarial de las mujeres en la industria tecnológica de Silicon Valley y otras áreas. En 2005 fue declarada Persona del Año por la revista Time y en 2006 recibió el Premio Príncipe de Asturias por contribuir de forma ejemplar al progreso de una comunidad.
Aunque formaban una de las parejas famosas más estables y los unía la filantropía, en este 2021 decidieron separarse. Aún están en el proceso de división de bienes, ya que se casaron sin un acuerdo prenupcial.
Según Forbes, Gates cuenta con una riqueza de más de 130 mil millones de dólares. Ted Billbe y Sherri Anderson son los abogados que están a cargo de la división económica. El imperio Gates incluye casas en cinco estados norteamericanos, una flota de autos, una colección de arte que incluye un libro de escritos y bocetos de Leonardo da Vinci (valuado en $ 30 millones) y una serie de jets privados, según el Daily Mail.
Su divorcio podría superar los 35 mil millones de dólares, según el Times.
Aunque cada quien sigue su propio camino, Melinda y Bill siguen trabajando juntos en su misión de luchar contra enfermedades como la poliomelitis y la malaria, además de invertir en educación, mejorar el acceso a Internet y buscar la reforma de las leyes de control de armamento en Estados Unidos para limitar su venta.