La ciencia del buen dormir: consejos para lograr un descanso de calidad
¿Sabías que no dormir bien puede causar problemas de salud graves? Conoce cómo proteger tu descanso y tu bienestarfreepik

¿Por qué dormir bien es más importante que nunca? Esto dice un experto

El sueño es más que un descanso: es autocuidado. Aprende cómo afecta dormir mal a tu cuerpo y cómo lograr un sueño reparador

La productividad alta se ha convertido en sinónimo de éxito en la actualidad, y dormir bien parece haber pasado a ser un privilegio reservado para pocos. “Vivimos en un momento donde todo va muy rápido: el estudio, el trabajo, el estrés… todo nos ocupa el tiempo”, comenta el doctor Carlos Cervantes, médico internista. “En mi caso, trabajo casi 16 horas diarias. Duermo apenas cuatro horas porque a las cinco de la mañana ya debo levantarme nuevamente para ir a trabajar”.

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Este ritmo de vida, cada vez más común, ha hecho que el sueño (particularmente el sueño reparador) se perciba como un lujo. Y no es una exageración: según la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente el 40 % de la población mundial sufre algún trastorno del sueño. Otra encuesta global de Philips (2020) reveló que el 62 % de los adultos consideran que no duermen bien y el 44 % afirma que su calidad de sueño ha empeorado en los últimos cinco años. La falta de descanso está dejando de ser una consecuencia ocasional para convertirse en una constante del estilo de vida moderno.

El cuerpo pasa factura

Las consecuencias médicas de no dormir bien son profundas y múltiples. “Si no duermes bien, pasas estresado, cansado, y tu cerebro no funciona al 100 %”, advierte el doctor Cervantes. Además, el sistema inmunológico se debilita, lo que incrementa la vulnerabilidad ante infecciones y enfermedades crónicas.

La ciencia respalda esta preocupación. Un estudio publicado en Nature Reviews Neuroscience afirma que la falta de sueño afecta directamente la capacidad de atención, el procesamiento emocional, la memoria y el aprendizaje. Además, la National Sleep Foundation advierte que dormir menos de seis horas por noche de forma continua puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y obesidad.

El descanso como inversión

Cada vez más personas están entendiendo que dormir no es una pérdida de tiempo, sino una inversión en salud. No se trata solo de cantidad, sino de calidad. Dormir bien es como reiniciar un sistema saturado: el cuerpo y la mente se restauran, se mejora el estado de ánimo, y se potencia el rendimiento general.

¿Dormir está de moda?

Dormir ya no es simplemente un acto biológico: se ha convertido en una tendencia. Desde apps que monitorean el sueño hasta pijamas de lujo y suplementos naturales, el ‘bien dormir’ ha generado una industria millonaria. Esto responde a una necesidad real, pero también a un cambio cultural: estamos aprendiendo a valorar el descanso como parte de una vida plena y saludable. “Cuando te levantas y estás activo al 100 %, significa que dormiste bien”, explica el Dr. Cervantes. Por el contrario, si hay somnolencia diurna, fatiga o falta de motivación, es probable que algo no esté bien. “Podrías tener incluso un problema como la apnea del sueño, que muchas personas ni saben que tienen”.

Lo que el cuerpo dice cuando no duerme bien

  • Fatiga constante. Señal común de que no se alcanza un sueño profundo.
  • Irritabilidad o cambios de humor. Puede afectar relaciones personales y estabilidad emocional.
  • Falta de concentración o memoria. Afecta el rendimiento cognitivo. Puede ser signo de insomnio o apnea del sueño.
  • Somnolencia diurna. Aumenta riesgo de accidentes laborales o de tránsito.
  • Dolores de cabeza frecuentes. Muchas veces relacionados a tensión acumulada por mal descanso.
  • Baja inmunidad (enfermarse seguido). El cuerpo necesita el sueño para regenerarse y fortalecer defensas.
  • Aumento de peso inexplicable. El sueño regula hormonas como la grelina y la leptina, relacionadas al apetito.
  • Problemas cardiovasculares. La privación crónica de sueño está asociada a presión alta y enfermedades del corazón.

¿Y cómo se duerme bien?

  • Establezca una rutina de sueño. Acuéstese y despiértese a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana. Esto regula su reloj biológico.
  • Apague las pantallas antes de dormir. La luz azul del celular, la televisión o la computadora altera la producción de melatonina, la hormona que induce el sueño.
  • Cree un ambiente adecuado. El dormitorio debe ser oscuro, silencioso y fresco. Use cortinas blackout, tapones para los oídos o una máquina de ruido blanco si es necesario.
  • Evite comidas pesadas por la noche. Cenar muy tarde o con alimentos grasosos dificulta la digestión y puede interrumpir su descanso.
  • Reduzca el consumo de cafeína y alcohol. Aunque el alcohol puede darle sueño al principio, interfiere con las fases profundas del sueño.
  • Haga ejercicio, pero no antes de dormir. La actividad física durante el día mejora el sueño, pero ejercitarse muy tarde puede activarlo demasiado.
  • Practique técnicas de relajación. Respiración profunda, meditación, leer o tomar un baño tibio pueden ayudar a que el cuerpo entre en modo descanso.

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