"Fasinarm necesita apoyo para salir de esta crisis"

Fasinarm está en busca de fondos que le permitan salir de la crisis surgida por la pandemia del COVID-19. La fundación emprendió una campaña de recaudación a través de la plataforma GoFundMe y trabaja para lograr el apoyo de benefactores que financien la educación de sus estudiantes.

Mónica Bermúdez, directora técnico docente de la fundación -que atiende a chicos con discapacidad intelectual (en su mayoría con síndrome de Down)-, apela a la solidaridad de los guayaquileños y aspira a salir de esta difícil situación, que no es la primera en los 54 años de vida de la institución.

La pandemia los tomó en época de vacaciones, ¿cuáles fueron los primeros pasos que dieron ante lo que se venía?

Por ser un servicio educativo-formativo que atiende a niños, jóvenes y adultos, el personal se fue de vacaciones el 28 de febrero. Cuando ocurrió la pandemia tenía solo a la parte administrativa. Nos reintegramos el 30 de marzo por teletrabajo y tuvimos la primera reunión con nuestra directora general para definir cómo íbamos a plantearnos el año ante la incertidumbre.

¿Qué decidieron?

Comenzamos a definir una línea base para saber cómo se encontraba el personal, los estudiantes y sus familias. Aplicamos un cuestionario en Google Forms, que nos permitió identificar qué trabajadores estaban afectados por coronavirus y cómo se sentían emocionalmente, igual hicimos con las familias de los estudiantes. Con esa información comenzamos a atender su bienestar emocional. Teníamos que estar cien sobre cien para poder retomar nuestras actividades.

¿Cómo estaba el personal?

Mantuvimos intervenciones grupales para contención emocional con una profesional experta en esta área, como apoyo voluntario.

¿Qué ocurría en los hogares de los alumnos?

Estaban pasando por necesidades emocionales, que fueron atendidas, pero también por falta de alimentación. Comenzamos a hacer una serie de gestiones con amigos solidarios, con autoridades y con aliados para hacer entrega de kits de alimentos. También, por medio del grupo ‘Amigas de Fasinarm’, que es el voluntariado que apoya a la fundación, hicimos gestiones para la entrega de medicinas.

Pero allí venía otro problema, que era cómo iban a manejar la educación a distancia con los chicos...

Se han realizado unas lecciones en videos, grabadas por los terapistas y las docentes que se envían por WhatsApp, centrándonos en las capacidades, recursos y fortalezas de las familias. Hemos probado todo mayo el proceso y ha sido gratuito.

Justamente una de las trabas es la falta de fondos de algunos padres que no han podido matricularlos...

El 2019 cerramos con 270 estudiantes atendidos (la fundación cuenta con educación inicial, con la escuela y con talleres formativos y de inclusión laboral para adultos). Hasta ahora se ha matriculado el 50 %; estamos dando facilidades de pago y también hemos extendido la fecha de matriculación hasta el 15 de junio.

¿Cómo les va con la campaña de recaudación?

En GoFundMe, la meta es conseguir 80.000 dólares. Recordemos que la educación especializada es costosa y los padres dan aportes diferenciados de acuerdo a su situación económica. Por ahora nos hemos manejado con estrategias de baja tecnología, con videos de WhatsApp, por videollamadas o llamadas telefónicas, pero queremos también en algún momento acceder a una plataforma virtual abierta a la comunidad. Por eso, la campaña de recaudación tiene el eslogan: ‘Sus donaciones mantienen vivo el futuro’.