¿Por qué me siento mal cuando tomo vitaminas?: esta es la respuesta

Tomar vitaminas es una práctica común para muchas personas que buscan mejorar su salud y bienestar. Sin embargo, para algunos, esta rutina puede venir acompañada de un efecto secundario indeseado: sentirse mal después de tomarlas. Si eres una de esas personas que experimenta náuseas, malestar estomacal o incluso dolores de cabeza tras ingerir vitaminas, no estás solo. 

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Aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre por qué tus vitaminas pueden estar haciéndote sentir náuseas y cómo obtener sus beneficios sin sufrir los efectos secundarios desagradables.

1. No debes tomar las vitaminas con el estómago vacío 

Una de las razones más comunes por las que las personas se sienten mal después de tomar vitaminas es hacerlo con el estómago vacío. Muchas vitaminas, especialmente las solubles en agua como la vitamina C y las del complejo B, pueden causar irritación en el estómago si no se toman con alimentos. La solución es simple: siempre toma tus vitaminas con una comida o un snack.

2. Es probable que seas sensible a ciertos ingredientes de las vitaminas 

Algunas personas pueden ser sensibles a ciertos ingredientes presentes en los suplementos vitamínicos, como los colorantes, conservantes o rellenos. Si sospechas que esta puede ser la causa de tu malestar, intenta cambiar a una marca de vitaminas más natural y libre de aditivos.

3. Sobredosis de vitaminas 

Aunque es raro, tomar dosis demasiado altas de ciertas vitaminas puede causar malestar. Las vitaminas liposolubles (A, D, E y K) se almacenan en el cuerpo y pueden acumularse hasta niveles tóxicos si se consumen en exceso. Siempre sigue las indicaciones de dosificación y consulta con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier nuevo suplemento.

4. Interacción con otros medicamentos 

Algunas vitaminas y suplementos pueden interactuar con los medicamentos que estás tomando, causando efectos secundarios. Es importante informar a tu médico sobre todos los suplementos que estás tomando para evitar interacciones potencialmente peligrosas.

5. Tu cuerpo puede tener problemas para absorber las vitaminas 

Algunas personas pueden tener problemas para absorber ciertos nutrientes debido a condiciones médicas subyacentes como la enfermedad celíaca o la enfermedad de Crohn. Si sospechas que este puede ser tu caso, consulta a un médico para realizar las pruebas necesarias y recibir el tratamiento adecuado.

6. Es probable que los suplementos vitamínicos sean de mala calidad

La calidad del suplemento también puede influir en cómo te sientes después de tomarlo. Opta por marcas de suplementos reconocidas y de alta calidad que hayan sido probadas y verificadas por terceros para asegurarte de que estás obteniendo lo que realmente necesitas sin contaminantes.

7. No tomes vitaminas antes de hacer ejercicio

No las tomes antes de hacer ejercicio porque al hacerlo, en tu estómago se moverán e inducirán la producción de ácido gástrico. Eso podría empeorar la acidez estomacal o el reflujo.

¿C¨ómo prevenir el malestar después de tomar vitaminas?

Algunas personas padecen deficiencias de hierro clínicamente diagnosticadas, como la anemia, por lo que no tomar un suplemento no es una opción.

En lugar de omitir el suplemento, si te hace sentir mal, tómalo con un pequeño refrigerio, pero evita los alimentos ricos en fibra, alimentos o bebidas que contengan cafeína y leche durante 3 horas, ya que el calcio puede limitar la absorción.

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