Mente positiva: 'Cuatro claves de la sabiduría tolteca'
Para los toltecas, las palabras son mágicas y su poder se evidencia en cada acción del ser humano
Podemos aprender de todas partes. Cada persona, cada experiencia y cada momento pueden dejarnos una lección valiosa si así lo queremos. Un conocimiento bueno o malo sobre algo que nos servirá en el futuro. Hoy, en Mente Positiva, analizaremos cuatro enseñanzas de la cultura Tolteca que encaminan la vida por un sendero más armonioso.
En 1997, el médico mexicano Miguel Ángel Ruiz escribió Los Cuatro Acuerdos, un texto basado en la sabiduría tolteca que dicta bases mínimas para la vida cotidiana. Bases que no son fáciles de aplicar pero que ayudan a mantener la calma en un mundo complejo y siempre cambiante.
¿Qué son los cuatro acuerdos? Aunque la respuesta a esa pregunta es amplia, resumiremos cada uno de los acuerdos para poder practicarlos lo más pronto posible. Es más, a puertas de un nuevo año podrían ser parte de los propósitos a cumplir en 2021.
Sé impecable con tus palabras
Según el autor, las palabras son mágicas y su poder se evidencia en cada acción del ser humano. Si cuidamos lo que decimos y usamos los términos adecuados para expresar nuestras emociones evitaremos conflictos y no lastimaremos a nuestros semejantes.
Además, usar las palabras con cuidado significa que -como hemos advertido en este espacio- no daremos importancia a las cosas que son banales y pasajeras.
No tomes nada como personal
Lo que dicen los otros no tiene que afectarnos. Cada persona debe cuidar sus palabras pero nosotros debemos tomar lo que viene como un criterio, una postura y nada más. Nada es personal si nosotros evitamos que lo sea.
No adivines ni supongas
El acuerdo que evita más de un dolor de cabeza. Presuponer lo que alguien cree de nosotros por lo general es un error. La expectativa que creamos en nuestra mente hace que muchas veces caigamos en enfrentamientos por cuestiones que ameritaban solo una conversación pacífica.
Haz siempre lo máximo
¿Cómo evitamos las críticas a nuestras labores en la oficina, en el hogar o en cualquier otro espacio? Pues dando lo mejor que tenemos en cada lugar. Y si aún después de eso recibimos cuestionamientos sabremos que dimos nuestro máximo esfuerzo y ese será un buen momento para recordar los acuerdos uno, dos y tres.
