Un mes de nuevas posesiones en las iglesias de Guayaquil
La Arquidiócesis de la ciudad anunció que habrá otros cambios en las parroquias, con el objetivo de cubrir las necesidades
Octubre ha sido un mes de cambios en las diferentes parroquias de Guayaquil. El monseñor Giovanni Piccioli, obispo auxiliar de la Arquidiócesis, explicó que se trata de un proceso que permite ayudar a cubrir las necesidades parroquiales de la ciudad. Además, con las nuevas asignaciones se busca respetar los procesos y ayudar a crecer a las parroquias, indicó.
Por eso, en este mes el arzobispo y los obispos auxiliares han posesionado a los sacerdotes asignados a diferentes parroquias. Lo hacen con eucaristías especiales, que son el último requisito para que un presbítero asuma su cargo.
De esta manera, el padre Luis López se convirtió en el nuevo párroco de la iglesia Santo Tomás Moro; Raniero Marincioni, de Santa Teresita del Niño Jesús; y César Piechestein, de Nuestra Señora de Czestochowa.
La iglesia Ángel de la Guarda recibió a Héctor Atocha, mientras que el santuario Nuestra Señora de la Alborada acogió a José Manuel Delgado y San Martín de Porres a Álex Alvarado.
Un adiós desde los autos para los guías espirituales de La Puntilla
Leer másSe informó además que Jacinto Cruz fue designado como párroco de San Juan XXIII, en Santa Elena.
No serán los únicos cambios, pues la Arquidiócesis de Guayaquil anunció que en lo que resta de este mes se darán nuevas posesiones.
Los sacerdotes en sus nuevas parroquias se comprometen a cumplir “las funciones de enseñar, santificar y regir, con la cooperación también de otros presbíteros o diáconos, y con la ayuda de fieles laicos, conforme a la norma del derecho”, según el numeral 519 del Código de Derecho Canónico.
En las redes sociales, los fieles dieron la bienvenida a sus nuevos párrocos y despidieron también a quienes fueron asignados a otros sectores.