Niños de un hogar de acogida preparan muestra de pintura

Cuando Marco Martínez Sierra (Guayaquil, 1962) se refiere a sus alumnos del Hogar Inés Chambers, se emociona. Los describe como artistas juveniles que ya tienen una larga lista de obras expuestas y varias de estas vendidas.

Es más, en medio de una de sus clases recientes en este complejo benéfico ubicado en el sector sureste de Guayaquil, Martínez señala al pequeño David, de 11 años, quien se ha impresionado tras conocer que existió un tal Picasso y que pintaba en la forma que él también pinta ahora. “Desea ser un Picasso”, dice Martínez, mientras muestra uno de los cuadros elaborados por David, luego de las clases sobre el cubismo que les dio en algún momento.

• La gran casa. El Hogar Inés Chambers tiene actualmente capacidad para acoger a 60 niños y niñas de entre los 3 y los 12 años. Fue fundada en 1929.

Pues Martínez, junto a sus alumnos -niños y niñas- se preparan para colocar sus pinturas y arte objetos en una nueva muestra, denominada 'ExpoArte Feeling'. Antes lo habían hecho en el Museo Municipal -en la sala polivalente, en dos ocasiones-, en el Tenis Club, sede Guayaquil y Samborondón; en el núcleo provincial de la Casa de la Cultura -salas Juan Villafuerte y Manuel Rendón-, y hasta en Guayarte.

Esta vez, desde el 16 de febrero, las obras de estos niños estarán expuestas en el Museo Luis A. Noboa Naranjo (calles P. Icaza 302 y Córdova).

“Para esto, han trabajado duro, pero en estos trabajos se podrá ver cómo han desarrollado su personalidad, su autoestima”, asegura Ricardo Koenig, quien preside a la Benemérita Sociedad Protectora de la Infancia (BSPI), entidad guayaquileña que está a cargo precisamente del Hogar Inés Chambers.

• Un perfil. Marco Martínez Sierra, tiene más de 36 años en el quehacer cultural. Ha ejercido la cátedra en centros educativos, institutos, universidades, fundaciones, museos.

“Muchos de ellos, cuando llegaron hasta el complejo, no sabían ni comer en una mesa. Hoy con sus manos no solo ya saben usar los cubiertos, sino que hasta crean arte”, agrega Koenig, quien agrega que las clases de pintura es parte del proceso de educación de estos niños, quienes han sido derivados por el Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES). “Son niños que provienen de hogares disfuncionales. Que han sufrido de maltrato, negligencia, abandono y hasta abuso sexual”.

El MIES, por medio de un convenio con la BSPI, encarga a los menores al Hogar Inés Chambers y en esta institución se los acoge, los alimenta, les ofrece atención de salud, educación, formación en valores, atención psicológica, vestimenta y recreación. “Aquí todos los niños y niñas tienen siempre una sonrisa en el rostro, porque tratamos de darles motivos para que sonrían”, agrega Koenig.

Acerca de las obras que se presentarán en la muestra el jueves 16 de 2023, desde las 17:00, hay trabajos elaborados al óleo, tiza, lápiz... obras plasmadas en cartulina, tela o madera. “También hemos reciclado una variedad de materiales de desecho para que los niños plasmen sobre estos su arte”.