La olvidada salud visual de perros y gatos
Hay tres momentos clave en la vida del animal en que deben someterse a chequeos. Algunas razas tienen más riesgo de padecer ciertas enfermedades
Hay que prestar atención a las señales. Por ejemplo, cuando las mascotas empiezan a refregarse los ojos en superficies cercanas o presentan molestia ocular, abundante secreción como lagañas o lagrimeo. Al igual que el humano, los animales sufren de enfermedades oculares. Algunas avanzan con la edad, son genéticas, y empeoran en ciertos ambientes. Incluso, según la raza, puede ser algo muy serio.
La médico veterinaria María Dolores Villacís, con nueve años de experiencia en Oftalmología, cuenta que las revisiones preventivas con un especialista son clave al menos en tres momentos de la vida de la mascota. La primera debe ser antes de que cumpla el año, luego cuando tengan entre cinco y seis años y la última entre los siete y diez, salvo presente molestias antes.
Aunque hay una mayor preocupación por la salud visual de los animales, aún es algo que muchos desconocen. La profesional, quien labora en el Hospital Veterinario Medipet, en Quito, cuenta que hay dueños que llegan con sus mascotas cuando estas ya tienen una ceguera irreversible. Se dan cuenta porque comienzan a tropezarse, pero para llegar a esto ya ha pasado mucho tiempo, pues hay que recordar que los animales tienen muy desarrollado el olfato y la audición y es así como se guían y disimulan por mucho tiempo una ceguera que viene progresando.
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Entre los animales que tienen más riesgos de padecer dolencias oculares están los braquicefálicos como los bulldog inglés, bulldog francés, pug, boston terrier, pequinés, shihtzu, bóxer, maltés y gatos como el persa, que son animales con cara chata y ojos prominentes con muchos pliegues; les crecen pelos en zonas cercanas a los ojos, lo que hace que se lastimen o irriten. También se les puede pigmentar la superficie ocular por la irritación o falta de lagrimeo adecuado. Por sus ojos grandes, a veces se rozan o laceran en cualquier juego y al andar entre plantas y, en casos más severos, hasta sus ojos se salen completamente de su órbita generando una urgencia oftalmológica con posterior ceguera.
- Cuidado con el sol
En el pastor alemán y cruces se presenta una patología que es muy común en nuestro medio y es hereditaria; se llama Queratitis Superficial Crónica y el exceso de exposición al sol hace que se desarrolle un tejido anormal en la superficie ocular y si no recibe tratamiento a tiempo llegará a generar mucha molestia y pérdida visual. Por eso es importante evitar que pasen en patios expuestos al sol si son positivos a la enfermedad. Hay que consultar al veterinario qué razas pueden estar más tiempo en exteriores para evitar así afectaciones.
- Aparecen las cataratas
Los animales también las padecen y no solo se presentan en animales viejos, pues pueden incluso aparecer en los jóvenes, de ocho o diez meses de edad, y en animales diabéticos. Dependiendo del problema pueden ser operados, pero a veces este mal viene combinado con daño de retina o con otras patologías. En estos casos hay que dar otros tratamientos que sean más conservadores. Hay mucha predisposición a estas patologías en razas como el french poodle, schnauzer, cocker, boston terrier, husky siberiano y otros. En el caso de glaucoma, es muy grave y frecuente en razas como los akita, chow chow, cocker, shar pei, y si se detecta en forma temprana puede evitar complicaciones oculares desastrosas.
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Hay animales que nacen con exceso de párpados, como los bulldog inglés, mastín Napolitano, shar pei, american bully. A veces tienen mucha piel y se generan pliegues que rozan los ojos o sus párpados son muy largos en comparación al tamaño de sus ojos, por lo que necesitan correcciones tempranas para evitar sufrir lesiones oculares. Dependiendo del caso y de la causa se podrá hacer una cirugía. Lo ideal es tratarlos a tiempo para minimizar problemas futuros. En el caso de los perros de pelo largo es importante que mantenga despejados los ojos. El aseo y el rasurado en esa zona es clave.
- A la hora del baño
Al bañarlos hay que tomar precauciones y tener cuidado con los ojos del animal. Se debe enjuagar bien con alguna solución fisiológica o agua limpia para sacar cualquier resto de champú que pueda quedar. En el caso de que por accidente se le meta algo dentro de los ojos, la persona debe lavarle rápido esa área para evitar que la sustancia penetre. Se lo puede hacer colocando agua en la zona o con goteros de solución fisiológica.